El efecto de la vacunación del coronavirus se nota en las residencias. Los brotes se han reducido aunque han hecho pasar momentos muy difíciles a mayores como Manuela, que se contagió tras recibir su primera dosis en Tarragona. Pero, ahora tiene un motivo doble de celebración: acaba de superar la enfermedad y además cumple 104 años rodeada por el cariño del resto de los residentes y de todo el personal de su residencia.
Manuela Gaibar, residente desde 2019 en L’Onada La Ràpita, en Tarragona, ha cumplido 104 años. Lo hace en circunstancias muy especiales: entre medidas muy estrictas de seguridad por el coronavirus, pero con tarta y velas. Se la traen los cuidadores de la residencia con EPI. Su mejor regalo es haber superado la enfermedad tras un brote en la residencia que se desató entre la primera y la segunda dosis de la vacuna.
El 8 de enero, la mujer, como otros residentes, recibió la vacuna de Pfizer-BioNTech. Solo 11 días después se desató un brote, según publica 'El Diari de Tarragona'. Ella dio negativo en el test, pero presentó sintomatología leve en los días posteriores y, en un test posterior dio positivo. Tuvo una recuperación rápida y sin complicaciones, casi milagrosa teniendo en cuenta su edad.
La dirección del centro atañe esta buena recuperación al suministro de la primera dosis de la vacuna. "El caso de Manuela es concreto y no sabemos hasta qué punto ha tenido que ver la vacuna, pero si miras en general ves que la diferencia es clara. Hemos tenido un brote de 21 personas positivas y solo una defunción. Una defunción que no tocaba ya es mucho, ya es algo que lamentamos, pero sin la vacuna, la proporción habitual habría sido de 11 o 12", explicaba Penny Subirats, la directora del centro, al mismo diario.
No sin "rabia" porque el único brote que ha tenido la residencia interrumpiese el proceso de vacunación, el geriátrico celebra que a día de hoy se haya podido continuar inoculando y que ya no haya ningún anciano positivo en esta enfermedad.
Desde que comenzase la pandemia, al menos 29 562 personas mayores han fallecido por coronavirus en residencias desde que comenzó la pandemia de la Covid-19 hace casi un año, en marzo de 2020, según un recuento realizado por Europa Press a partir de los datos facilitados por las consejerías de salud, servicios sociales e institutos de estadística de las comunidades autónomas a lo largo de los últimos siete días.
Según estos datos, la comunidad con mayor número de fallecidos en residencias de mayores es Cataluña con un total de 8 568 mayores que han perdido la vida como consecuencia del coronavirus.
Por su parte, la Comunidad de Madrid no ofrece datos desagregados y solo indica que el total de fallecidos con confirmación o sospecha de Covid desde marzo en centros sociosanitarios (sobre todo, residencias de mayores y también centros de salud mental y dependientes) es de 5 041 personas. Tampoco desglosan los usuarios de residencias que han muerto en hospitales.
Les sigue Castilla y León, donde han muerto un total de 3 977 mayores en residencias (2 872 con Covid confirmado y 1 105 con síntomas compatibles); y Castilla-La Mancha, donde los fallecimientos por Covid de residentes de estos centros desde el inicio de la pandemia ascienden a 1 973.
En quinto lugar se situaría Andalucía donde, según datos del Instituto de Estadística y Cartografía, se han registrado 1 845 fallecidos en residencias de mayores por Covid desde marzo. Además, en la Comunidad Valenciana, la pandemia ha acabado con la vida de 1 548 ancianos que vivían en residencias.
Por su parte, Aragón ha contabilizado un total de 1 517 fallecimientos en centros residenciales, en su mayoría de personas mayores, 714 de los cuales se habrían producido desde que comenzó el segundo periodo de brotes, en el mes de julio.
También supera la barrera de los mil fallecidos en estos centros el País Vasco, con 1 063 muertes de ancianos por Covid, de los cuales 660 en la primera ola y 403 desde que comenzó la segunda oleada.
Por debajo de mil, se sitúa Asturias, con 932 mayores fallecidos, lo que supone el 50% del total, aunque desde la consejería de salud constatan una "reducción" de la letalidad del "34%" de la primera ola al "8%" de la tercera.
Le siguen Extremadura, donde han muerto 757 personas mayores por Covid en el primer año de pandemia; Galicia, con 719 fallecimientos; Navarra, con 392; Murcia, donde han fallecido 342 ancianos; La Rioja, que suma 291 fallecimientos; Cantabria, donde han muerto 268 mayores; Baleares, con 255 decesos; y Canarias, con 74.