Las piscinas públicas de Madrid abrirán a partir del 1 de julio, tal y como ha anunciado el vicepresidente del Gobierno regional, Ignacio Aguado, este jueves en la sesión de control de la Asamblea de Madrid. Por ejemplo, es segura la apertura de las piscinas del Canal. "Ya les anuncio, ha dicho, que las piscinas abrirán el 1 de julio con todas las medidas de seguridad", ha dicho Aguado. Otra cosa es el infierno económico que está suponiendo abrir piscinas en las comunidades de vecinos, gran parte de las cuales están renunciando a hacerlo por los costes que supone.
Esta apertura está coordinada, según ha indicado, con el Ayuntamiento de Madrid, que también abrirá el 1 de julio las piscinas municipales. Aguado ha insistido en que la apertura de piscinas no implica que los madrileños deban bajar la guardia con el coronavirus y ha señalado que abrirán con "garantías" de seguridad. Ganas de piscinas hay, no en vano, se ha disparado las peticiones de piscinas para terrazas y espacios pequeños, con los riesgos que esto supone según los expertos.se ha disparado las peticiones de piscinas para terrazas y espacios pequeños riesgos que esto supone Las piscinas hinchables pueden ser un foco de infección.
El Ministerio ha publicado un protocolo de seguridad
El Ministerio de Sanidad acaba de publicar un protocolo cuyo objetivo es establecer las medidas básicas de seguridad para velar por la salud de los ciudadanos en las piscinas. Dicho documento, consensuado con las comunidades autónomas y el sector que gestiona este tipo de establecimientos, entrará en vigor única y exclusivamente cuando el Plan de transición hacia una nueva normalidad establezca que es posible la apertura.
La posibilidad de prohibir el uso de tumbonas o hamacas para evitar posibles contagios o separarlas dos metros (la distancia de seguridad ahora es de 1,5 metros en el día a día) siempre y cuando se garantice que su uso no es compartido y que se garantice su adecuada desinfección está ahí. También podrán utilizarse fundas desechables.
Sanidad recomienda pagar con tarjeta y clausurar las duchas de los vestuarios durante las fases de desescalada.
Un aspecto importante a tener en cuenta es la ventilación de los espacios cerrados, como vestuarios y baños, botiquín y salas técnicas. El hacinamiento y la ausencia de ventilación son factores que favorecen la transmisión del virus. Se recomienda así abrir puertas y ventanas exteriores para aumentar la circulación de aire en el área. Y, en el caso de que la ventilación se proporcione a través de medios mecánicos, estos deben conservarse en buen estado de mantenimiento, limpieza y grado de desinfección adecuado.
Es esencial que se realice una exhaustiva limpieza antes de proceder a la desinfección de todo el mobiliario (vaso, corcheras, escaleras de acero inoxidable, duchas, paredes, taquillas, etc.), y prestar especial atención a las superficies de contacto más frecuente como grifos, barandillas o pomos de puerta. El protocolo llama la atención sobre el hecho de que la desinfección carece de eficacia si la superficie no ha sido previamente desprovista de suciedad que puede servir de refugio a los microorganismos.
En el contexto de los materiales que pueden encontrarse habitualmente en las piscinas, en diversos estudios realizados sobre la persistencia del SARS-CoV-2 se ha observado que en acero inoxidable fue de 48 horas, en plástico de 72 horas mantenidas las condiciones a 21-23 ⁰C y 40% de humedad relativa. En condiciones controladas de laboratorio no se detecta el virus después de 3 horas en superficie de papel, de 1 a 2 días en madera, ropa o vidrio, más de 4 días en billetes de dinero. En cuanto a la influencia de la temperatura, se observa que el virus es más termolábil a medida que aumenta la temperatura.
Respecto a los desinfectantes se podrán usar diluciones de lejía 1:50 recién preparada o cualquiera de los desinfectantes con actividad virucida que se encuentran en el mercado y que han sido autorizados y registrados por el Ministerio de Sanidad.