Una tarde en la que el hijo de la señora Logan llegó a casa, este le comentó que tenía que usar un chaleco reflectante durante el recreo, lo que sorprendió a su progenitora. El niño, le respondió lo siguiente: "Mis profesores me han dicho que tengo que usar este distintivo para que puedan localizarme en los momentos de descanso", tal y como informa el portal web Daily Mail.
La madre se quejó de esta extraña política que adoptó el colegio de su hijo, ya que era el único que tenía que usar este distintivo. Finalmente, la progenitora decidió ponerse en contacto con el director de la escuela, Steve Whitehouse, para hablar sobre la situación de su hijo Charlie. Después del encuentro, se llegó a un acuerdo a partir del cual el niño no tendría que llevar más el chaleco.
El autismo es un tipo de trastorno que desencadena varios efectos en el cerebro y provoca que sea más complicado comunicarse e interactuar con otras personas (conversar, jugar, reunirse o socializar con los demás).
Les puede resultar muy complicado formar parte de juegos y comprender las reglas durante la infancia. Con la llegada de la adolescencia, las personas que se encuentran en el espectro autista podrían tener dificultades para saber qué ropa está de moda, cómo practicar un deporte o, simplemente, cómo juntarse con amigos y hablar.
No todas las personas que sufren un trastorno del espectro autista comparten los mismos problemas. Lo más probable es que dos personas con autismo no actúen de la misma forma ni comparten las mismas habilidades. Suelen ser buenas para la música, los ordenadores y el arte.
Debido al funcionamiento del cerebro en personas con autismo, algunos adolescentes pueden tener problemas para mirar directamente a las personas mientras hablan. Les resulta complicado entender el sarcasmo o los chiste. Como aprendieron a hablar a partir de otras personas, tienden a imitar lo que aprendieron con una voz que puede resultar aburrida o sin expresión.
Tienden a hacer cosas que pueden parecer raras o repetitivas, como emitir la misma palabra una y otra vez, o mover una parte del cuerpo de una manera determinada. Es como si su cerebro tuviera hipo. Son conscientes de que lo están haciendo, pero tienen problemas para controlarlo.
Pueden parecer insensibles o sin emociones, pero sí son capaces de expresar lo que sienten en algunas ocasiones.