Comienza en Barcelona el juicio del crimen de la guardia urbana. En el banquillo dos agentes. Rosa Peral y Albert López, acusados de matar a Pedro Rodríguez, quien era pareja sentimental de ella en aquel momento. Según fiscalía y acusación, ambos planearon matarle para deshacerse de él y poder reunudar una antigua relación.
El Tribunal del Jurado que juzgará a los dos acusados del crimen de la Guardia Urbana, los también agentes del cuerpo Albert López y Rosa Peral, se formará este viernes en la Audiencia de Barcelona, según el guión del juicio.
López y Peral declararán el 11 y el 12 de marzo, respectivamente, en el juicio por jurado popular en la Audiencia de Barcelona, acusados de asesinar al novio de ella, también agente, y quemar su coche con el cadáver dentro.
Las sesiones públicas del juicio empezarán el lunes 3 de febrero con la lectura de los escritos de cada parte y las alegaciones previas, mientras que en los días siguientes será el turno de los testigos.
Entre las personas que testificarán, habrá mossos d'Esquadra y mandos de la Guardia Urbana, como un intendente mayor --el jueves 13 de febrero, según el guión--.
Las sesiones están previstas de lunes a jueves y el juicio durará previsiblemente hasta el 16 de marzo, día para las conclusiones y los informes finales, aunque el guión puede ser alterado a medida que avancen las sesiones.
Los hechos que se juzgarán se remontan al 2 de mayo de 2017, cuando, en el domicilio donde convivían la víctima y Peral en Vilanova i la Geltrú (Barcelona), "de común acuerdo y en ejecución de un plan preconcebido", los dos sospechosos presuntamente acabaron con la vida de P.R.G., y después lo trasladaron en el maletero de su coche hasta la zona del pantano de Foix y lo quemaron, según el auto de apertura de juicio oral.
Peral y López serán juzgados por el jurado popular por un presunto delito de asesinato, en base a una veintena de pruebas periciales e informes.
La Fiscalía pide 24 y 25 años de prisión, respectivamente, para López y Peral al ser presuntamente coautores de un presunto delito de asesinato con alevosía --con agravante de parentesco para ella--, y también pide para ambos 10 años de libertad vigilada tras cumplir la pena de cárcel.
Según afirma el Ministerio Público en su escrito de acusación, los procesados presuntamente mataron a P.R.G. porque llegaron a la conclusión de que "por diversas razones obstaculizaba su relación y situación" sentimental, ya que habían sido amantes y supuestamente habían reanudado su relación.
La familia del asesinado, que pide para ambos 25 años de cárcel, apuntó en su escrito de acusación que uno de los motivos por los que los dos agentes le asesinaron era porque temían que la víctima pudiera "airear y dar publicidad" a datos que le implicaban a él en la muerte de un mantero en 2014.
En cambio, los dos sospechosos han reclamado su libre absolución al atribuir al otro la culpabilidad de los hechos, y en el caso de Rosa Peral, pedían como alternativa la apreciación de la eximente del miedo insuperable, y subsidiariamente de forma incompleta o como atenuante.