Una magistrada del condado de Hamilton en Ohio (EEUU) se debate entre la idea de condenar o no a Jennifer Walsh, una profesora de Educación Especial que confesó haber tenido relaciones sexuales a la fuerza con una alumna de 17 años de edad.
La duda en el planteamiento judicial que posee la jueza y por lo que ha pedido "más tiempo" para culpar a la docente de 27 años de edad, está dilatando la sentencia final al no tener certeza con seguridad si se trata de una coacción real o alterada, tal y como ha publicado el diario local Cincinnati.
La acusada de haber cometido un supuesto abuso sexual hacia una alumna a la que impartía clase se enfrenta a una probable condenada por la que permanecería 18 meses en la cárcel.
Sin embargo, la versión de la alumna ha desmitificado la totalidad de la culpa y ha generado dudas en la jueza que lleva el caso al asegurar que no fue forzada y que, de hecho, está "enamorada" de su exmaestra, que dimitió en su puesto de trabajo en el centro educativo de Cincinnati cuando el caso fue denunciado a la Policía.
Un testimonio que pone en materia de duda lo ocurrido entre mayo y agosto de 2018, y por lo que Walsh dejó el centro educativo en el mes de octubre. La alumna insiste en que "en el interior de su corazón está enamorada" de su exprofesora, mientras esta la observaba entre lágrimas.
Otra de las versiones que ha hecho reflexionar y pedir un "poco más de tiempo" a la jueza para deliberar sobre el caso y tomar una determinación es la del detective de la Policía que considera que la relación entre ambas mujeres "es real".