La joven, de 18 años, regresaba a su casa cuando en un parque de Bilbao la violaron la noche del pasado jueves seis hombres magrebíes. Después, le tiraron dinero y la dejaron marchar. Ella se fue directa al hospital y describió a la perfección a uno de los agresores, incluido su tatuaje. Gracias a eso, la policía los atrapó. Tienen entre 18 y 36 años y antecedentes por robo.
En la zona, todos los vecinos están conmocionados. “Tengo una hija de 17 años y estoy muy asustado ahora, obviamente”, cuenta uno de ellos.
La joven sufre una discapacidad intelectual mínima, y su violación en grupo ha vuelto a despertar la indignación social.
“Siento rabia. Que todo el peso de la ley y todo el peso de la justicia caiga sobre estos malhechores”, ha demandado el alcalde de Bilbao, Juan Marí Aburto.
Cientos de personas se han concentrado la tarde de este viernes en Bilbao. Es la tercera agresión sexual ocurrida en la ciudad en poco más de un mes.
“Siempre voy con miedo y pendiente del móvil”. “No debería pasar”, denuncian numerosas jóvenes.
El Gobierno hacía este mismo viernes un llamamiento para frenar esta escalada de violencia machista: “Basta ya de crímenes y agresiones a las mujeres”.