Jarvis, el youtuber que nunca más podrá jugar a Fortnite
Epic Games ha expulsado a uno de sus jugadores más famosos por usar un bot para terminar con sus adversarios
Epic Games, propietaria del famoso juego Fortinte, ha prohibido a uno de sus jugadores más conocidos volver a ser partícipe del videojuego. El motivo es que la empresa detectó la utilización de un bot que le permitía fijar y terminar con sus adversarios, tras lo que compañía decidió expulsarle del juego.
Tras conocer la decisión de Epic Games el youtuber Jarvis Kaye, más conocido por Jarvis publicó un video en su cuenta de Youtube en el que lamentaba la decisión de la organización y explicaba su actuación. Jarvis es jugador profesional de Fortnite y su carrera, a menos que la compañía cambie de decisión, ha acabado.
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El video cuenta con casi 7 millones de visualizaciones en solo tres días y es que el joven tiene más de 20.5 millones de seguidores. En las imágenes el joven afirma que el juego ha cambiado su vida para siempre, que le ha hecho reconocer su sueño y llevarlo a cabo. Dice no imaginar su vida sin el juego, y que ha dedicado cada hora de estos dos últimos años a mejorar su técnica. Además pide perdón, ya que debería haber prestado más atención a las normas de la comunidad, y justifica que la difusión de ese bot solo era como una mera curiosidad para sus suscriptores y que jamás había pensado que tendría esas consecuencias.
El youtuber se emociona progresivamente durante el vídeo y llora al decir que no podrá volver a jugar al juego nunca, además de que dará lo mejor de si mismo para que la compañía le perdone. En Twitter las opiniones están divididas, muchos se han sumado al hashtag #FreeJarvis, en el que los usuarios piden una rectificación de la compañía, otros, aplauden la decisión de Epic Games.
Sin embargo, lo que se puede observar en el video es una adicción que algunos expertos confirman. El experto en adicciones, José Cesar Perales, analiza además el aspecto social del juego “para una persona que se mueve en el juego no deja de ser otra parte más de su vida”. Añade que “en el momento en el que tú puedes comprar y pagar eso ya empieza a parecerse mucho al juego de azar”.
Jarvis no es un caso aislado, Fortnite tiene 250 millones de adeptos y muchos admiten una gran adicción al juego, entre ellos algunos chicos de Granada, que hoy decían a Informativos Telecinco que algunos juegan “sin comer, sin dormir” y otros admiten que “engancha más que la droga”.