La empresa pública Veiasa (Verificaciones Industriales de Andalucía), encargada de gestionar la Inspección Técnica de Vehículos (ITV),ha lanzado una advertencia específica a través de redes sociales para los vehículos matriculados a partir de 2008.
El mensaje explica que si el coche tiene encendido el testigo denominado MIL y conocido como fallo motor (generalmente es el que aparece en amarillo) se considera un defecto grave y, por consiguiente, no pasará la ITV, debido a que "presenta condiciones inadecuadas para el ensayo".
Veiasa ha incorporado a más de 240 trabajadores con el fin de reforzar el servicio de ITV. Las inspecciones de vehículos se vieron interrumpidas durante el estado de alarma decretado por el Gobierno por la crisis sanitaria de la covid-19, ya que no se consideró actividad esencial, lo que provocó una acumulación de tareas. Con el fin de "regularizar y normalizar esa situación", la empresa prevé continuar con este proceso de refuerzo en la dotación de personal.