Agentes de la Policía Foral de Navarra han imputado a un vecino de la localidad de Aoiz, de 44 años, como posible autor de un delito de abandono animal. El hombre parece que compró el perro, un can de raza pastor vasco, para poder salir durante el confinamiento. Una vez que se llega al final del estado de alarma y se puede salir sin restricciones, lo habría abandonado en la calle.
Los hechos se conocieron cuando una persona advirtió a la Policía Foral de que se había encontrado un perro en muy mal estado, desorientado y tembloroso. Los agentes que se desplazaron al lugar donde estaba el animal iniciaron la investigación a través del microchip identificativo del perro.
Según testigos, el perro ha estado una semana deambulando por el municipio, sin collar y desnutrido. Las diligencias propias del atestado han sido remitidas al Juzgado de Guardia de Aoiz y a la Fiscalía de Medio Ambiente de Pamplona.
La Policía Foral de Navarra ha puntualizado en Twitter que el perro se encuentra de momento con su dueño legal.