El impacto del cambio climático está causando que empeoren numerosas enfermedades que van desde alergias estacionales hasta problemas cardíacos o pulmonares. Los más afectados ante este fenómeno son los ancianos, los niños, las personas embarazadas, según apuntan los expertos en medicina, que se temen que lo peor esté aún por llegar, según recoge The Guardian.
"Hay investigaciones que sugieren que nuestros medicamentos recetados pueden estar causando daño debido a los cambios en los patrones de calor. Otro gran problema es que los fenómenos meteorológicos están cortando energías, lo que impide proporcionar atención en todos los centros de salud", comenta Aaron Bernstein, hospitalista pediátrico y codirector del Centro para el Clima, la Salud y el Medio Ambiente Global en la Universidad de Harvard.
"Hay evidencia de que los extremos eventos climáticos están afectando los suministros médicos críticos, por lo que no podemos hacer las cosas como lo haríamos normalmente ya que no hay líquidos intravenosos disponibles", agrega Bernstein.
Un estudio elaborado por Journal of the American Medical Association refleja que los enfermos de cáncer de pulmón que se someten a radiación tienen menos probabilidades de sobrevivir cuando hay un huracán activo durante su tratamiento.
Las personas que sufren alergias también se ven muy afectadas por el impacto del cambio climático. Las plantas producen más polen durante períodos más largos, por lo que las estaciones de alergia aumentan. Esta concentración de dióxido de carbono provoca que las plantas puedan crecer más y producir más polen, lo que provoca un aumento estimado del 20% de alergias en las personas.
“Los árboles solo producían polen en primavera, los pastos en verano y la ambrosía en otoño, pero estos períodos están empezando a aumentar cada vez más”, señala Neelu Tummala, especialista en oídos, nariz y garganta de los Asociados de la Facultad de Medicina de George Washington en Washington DC.
Bruce Bekkar, ginecólogo estadounidense que dejó la práctica medicinal para dedicar más tiempo a la actividad climática, recopiló alrededor de 68 estudios elaborados en EEEUU sobre la relación entre el calor, las partículas provenientes de los combustibles y su relación con los partos prematuros.
Bekkar comentó que los médicos deben hablar más con sus pacientes sobre las olas de calor y cómo estas pueden provocar nacimientos prematuros. Además de hablar más sobre cómo alejarse de la contaminación y el aire que puede perjudicar a los hijos. Pese a que las evidencias son menos sólidas que en otros ámbitos, está demostrado que las personas embarazadas son más vulnerables al calor y la contaminación.
La contaminación del aire perjudica gravemente al corazón. Los combustibles causan un aumento de hospitalizaciones y muertes por enfermedades relacionadas con problemas cardiovasculares, asma y otros problemas respiratorios. Los incendios también suponen un gran peligro. “Una quemadura solar en los pulmones puede desencadenar un ataque de asma”, comentan desde la asociación American Lung Association.
Los niños menores de 5 años son las personas más expuestas al peligro del impacto del cambio climático. Samantha Ahdoot, pediatra en Alexandria, Virginia, EEUU, trató a dos niños que sufrían un trastorno de déficit de atención, denominada hiperactividad (TDAH), y comentó que era más difícil de tratar en medio de la interrupción de la vida principal y sin registros de ajustes a las dosis de medicamentos.
Entre otros peligros que se afrontan con el impacto del cambio climático encontramos; la deshidratación y problemas renales, que pueden aparecer por desequilibrios electrolíticos, cálculos renales o insuficiencia renal, consecuencia de la dificultad para mantenerse hidratado; las enfermedades de la piel, como el cáncer, con origen en el aumento de las temperaturas y el agotamiento de la capa de ozono; las enfermedades digestivas, relacionadas con la contaminación del agua potable por las lluvias extremas que provocan un mayor riesgo de bortes de salmonela o bacterías; o las enfermedades de salud mental, relacionadas con las temperaturas extremas, que causan un mayor riesgo en las personas proclives a sufrir estos problemas.
Otros de los problemas derivados del impacto climático son las enfermedades neurológicas, que pueden aparecer por la contaminación de los combustibles que aumentan el mayor riesgo de accidente cerebrovascular y la nutrición, que también puede sufrir complicaciones. Los suministros de alimentos se ven afectados por la sequía o la inestabilidad social. El mundo tendrá que ser más consciente de todos los peligros a los que se expone. Nuestra salud depende del devenir del planeta.