La Audiencia de Alicante ha condenado a 36 años de prisión al hombre que violó hasta en tres ocasiones a la joven que él mismo había contratado para que cuidara de sus hijos durante sus vacaciones en la localidad de Calp en el año 2019.
El tribunal impone al hombre una pena de 12 años de cárcel por cada uno de los tres delitos, con un límite máximo de 20 años de internamiento tal y como establece el sistema penal español.
La víctima de origen magrebí, tendrá derecho también al pago de 30.000 euros por daños morales junto a otros 280 euros por lesiones.
Los hechos delictivos se produjeron durante el verano de 2019 en la vivienda que el condenado de 40 años de nacionalidad kuwaití pasaba las vacaciones.
El tribunal considera probado que, en una fecha no determinada de ese periodo, el ahora condenado entró a la habitación reservada para la canguro de sus hijos, provisto de un bote de crema lubricante, con la intención de mantener relaciones sexuales.
Según se ha podido saber, en la declaración la joven declaró que las relaciones se mantuvieron sin consentimiento por su parte. Además suplicó a su agresor que no la forzara porque procesaba la religión islámica y podía "destrozarle la vida".
Después de la primera violación, la hombre amenazó a la joven a quien aseguró que la materia si contaba algo. Semanas más tarde la volvió a violar.
En el transcurso de la tercera violación, en la que el hombre la obligó a realizarle una felación, la mujer logró huir de su agresor sin antes recibir varios golpes y patadas. Tras abandonar el domicilio, la joven acudió en busca de ayuda y denunció los hechos tal y como relata la sentencia.
La víctima aseguró en el juicio que no había denunciado antes los hechos porque se encontraba en una situación irregular. Tal y como ella misma relató en el juicio, su agresor le había asegurado que le ayudaría a conseguir los papeles a cambio de su trabajo como niñera.