Los pequeños Leni y Jenson, que cuentan ahora con 16 meses de edad, parecen dos mellizos más pero en realidad fueron concebidos con diez días de diferencia. Esto es debido a un raro fenómeno llamado superfetación en el los mellizos son concebidos con distinta edad gestacional.
Durante las ecografías rutinarias los médicos descubrieron que el tamaño de los fetos era bastante diferente el uno del otro, y mediante la realización de más pruebas descubrieron que existían 10 días entre la gestación del primero con el segundo.
En declaraciones de la madre al DailyMail, aseguró que el médico también quedó muy sorprendido por el hecho: “Me comentó que esto lo había visto muy pocas veces durante su carrera y que era increíblemente raro”.
Finalmente dio a luz a los dos bebés a la vez y no hubo ninguna complicación durante el parto.