Seis de la mañana de este martes. Calle Almería en Campamento, San Roque. Exterior noche. La Guardia Civil revienta la puerta de un lujoso chalet. En el interior del garaje un Range Rover de alta gama con matricula de Gibraltar. A la misma hora, en Algeciras, Estepona, La Línea y hasta en Villarrobledo, Albacete, 150 agentes actúan en escenarios parecidos. El objetivo es desmantelar la estructura de blanqueo de uno de los clanes más poderoso del Estrecho, el de los `Mauro´.
Volvamos a campamento, a ese vehículo con placa de Gibraltar. Su dueño es J.B, gibraltareño, y lugarteniente del hombre que da nombre al clan, Gareth Mauro, el narco que llegó de la Roca.
"Mauro empezó como piloto de embarcaciones y a partir de ahí se fue haciendo hueco. Luego pasó a trabajar para los `Castaña´ y se convirtió en uno de sus hombres fuertes. Es llanito, y aprovechaba sus contactos al otro lado", cuentan a NIUS fuentes de la lucha antidroga: "Y a partir de que fueron cayendo los `Castañas´ se fue independizando. El trafico de drogas, en todo caso, no funciona de forma piramidal. Es un yo te doy esto, tú me das esto, yo aporto esto y según sean las cosas tú te vas llevando un determinado porcentaje".
No hay una pirámide, pero sí una meseta en la que se agrupan los principales clanes y que Gareth Mauro ha pasado a compartir. En ella conviven Abdellaj el Haj `Messi´: "El más importante de todos, porque va directamente al moro, y controla toda la costa excepto La Línea", asegura un agente destinado en la lucha contra el narcotráfico. "Todo lo que se mueve entre Huelva y Almería, aunque sea de otra organización, depende de alguna manera del Messi. El se lleva un porcentaje". A su lado los `Castaña´, que controlan La Línea, el clan de los `Pantoja´, el del `futbolista´, y el clan llegado de Gibraltar, el de Gareth Mauro.
Tantos negocios compartidos, que muchos de ellos compartían hasta urbanización en La Línea. la famosa `Villa Narco´, que el pasado 29 de junio reventaban más de cuatrocientos agentes de la Guardia Civil. Entre sus residentes, cómo no, Gareth Mauro. Chalet con todo tipo de lujos, incluida piscina y baños con grifos de oro, pero sin el narco gibraltareño dentro que, una vez más eludió a la justicia.
"Creemos que está en Marruecos, igual que el `Messi´" reconoce un mando de las fuerzas de seguridad. "No se moverá mucho pero seguro que está en una urbanización de lujo por allí de puta madre. Esta gente no esta allí en un cuchitril escondidos, porque si no se vendrían para España".
Si allí no pueden seguirle la pista, sí pueden seguírsela aquí, a sus negocios y a su dinero. En diciembre pasado, ni más ni menos que en Villarrobledo (Albacete), el instituto armado desmantelaba un astillero del narco gibraltareño, mientras que en Palmones, Los Barrios, localizaba uno de sus narcoembarcaderos. Luego llegó el asalto a ´Villa Narco´ y registros por parte de la policía gibraltareña en seis de sus propiedades en el Peñon. Y ahora la caída de su lugarteniente.
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Yo ayer la casa que vi de su lugarteniente parecía un parque temático", cuenta un agente que participó en el registro. "No veas allí el dineral que había en ropa, en coches, en motos, cualquier capricho que te puedas imaginar allí estaba. Viendo lo que cuesta eso tú dices: este ni siquiera es Gareth Mauro, es un lugarteniente de él, y si el lugarteniente vive así, imagínate Gareth Mauro".
Cinco millones de euros, en esa cantidad se estima lo blanqueado por el narco de la Roca, en las propiedades y empresas, destapadas en este último golpe a sus intereses. "Son hasta nueve empresas las que han ido utilizando para blanquear su dinero. Muchas relacionadas con el mundo del motor, como naúticas o venta de motocicletas", precisan desde la lucha contra el narcotráfico. "Lógico, a Gareth le gustan las embarcaciones, las carreras, le gusta un poco vivir al límite".
Al límite, pero sin atravesar las aguas territoriales que separan Marruecos de España y Gibraltar. Mauro todavía tiene organización, todavía tiene tiene dinero pero a este lado le esperan dos causas por narcotráfico así que, por el momento, tiene que mirar el Peñón desde el otro lado del Estrecho.
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