Ángel Cruz y Patricia Ramírez se sientan ante los medios un año después de que su hijo Gabriel Cruz desapareciese, una rueda de prensa de agradecimiento y a la vez petición para que la sentencia sea justa.
“Agradeceros el haber venido. Como ha ido sucediendo desde que desgraciadamente hoy hace un año que nos arrebataron a Gabriel. Cada vez que hemos pedido ayuda, es cierto que todas las personas que nos han ayudado han sido de manera desinteresada, sin pedirnos nada a cambio. Queríamos atenderos a todos por igual, ir a cada programa habría sido priorizar a unos por otros, por ello hemos querido estar ante todos por igual”
“Un acto que desde el principio fue muy mediático, si Gabriel hubiese estado con vida hubiese aparecido sí o sí por la voz de los medios. Por fin estamos empezando a ver luz después de un año, ha sido un proceso de instrucción bastante dilatado en el tiempo. Esto conlleva que el proceso de duelo esté siendo más insoportable. En el procedimiento que queda nos gustaría pediros ese respeto de cara a finalizar un proceso que consideramos en desagrado, que podría ser el resultado del proceso final”
"Una de las cosas que más fuertes nos mantiene es luchar con hasta nuestra última gota de fuerza para que se haga justicia a Gabriel", han trasladado visiblemente emocionados en una rueda de prensa en la que se han mostrado "convencidos" de que habrá "un final justo" y han reconocido que son "conscientes" de que "viene lo peor" con la celebración del juicio por asesinato.
Ambos han expresado, asimismo, su convencimiento de que el crimen de su hijo "tiene que ver" con la muerte de la primera hija de la investigada en 1996, cuando esta residía en Burgos y la pequeña cayó desde una ventana, y han anunciado que van a solicitar "formalmente" que se incorpore al procedimiento testimonio de las actuaciones que se realizaron en su momento para esclarecer esta muerte.