Fitur se abre al público y cada país ofrece lo mejor de sí mismo para atraer al visitante. Hay ganas de viajar y dejar atrás la pandemia. La tecnología de la imagen permite sentir de cerca el destino sin salir de la feria. Las comunidades autónomas españolas han decidido volcarse en una nueva edición, con la vista puesta en la recuperación del sector para este verano y con la confianza de que los turistas retomarán sus viajes con total seguridad apostando por destinos más sostenibles y cercanos.
Aunque los españoles viajaron siete veces menos al extranjero que antes de la pandemia, el turismo nacional ya ha cogido velocidad de crucero, un turismo que entra por los ojos y por la boca. Valencia, La Rioja o la salmantina Guijuelo son buenos ejemplos de tesoros gastronómicos. Y en los días de público, un clásico son los cazadores de folletos y regalos. Lo profesionales llevan carros o maletas para no acabar agotados con tanta bolsa.
En una feria mucho más comedida que las anteriores, gastronómicamente hablando, debido a la irrupción de la mascarilla FFP2 en la moqueta azul, las distintas regiones españolas han ofrecido a los visitantes profesionales que buscaban entre sus folletos las mejores anchoas de Cantabria, los más selectos caldos de La Rioja o Castilla y León, el reconocido aceite andaluz o la famosa sidra asturiana, entre otros manjares.
La ilusión y las ganas de renacer turísticas quedan reflejadas en el stand de Galicia, que, con un diseño moderno y vistoso, ha querido simbolizar la esperanza y la ilusión con la que la región afronta el segundo año de Xacobeo.
El espacio expositivo cuenta con la presencia del 'botafumeiro' de plata en tamaño real realizado por los orfebres hace más de 60 años y con el que los visitantes podrán fotografiarse. En esta ocasión, formará parte de un set que jugará con espejos como símbolo de las muchas caras de Galicia como destino turístico.
Una ilusión que también se ve reflejada en el stand de Andalucía, que exhibe sus destinos turísticos y la alegría como una de sus mayores virtudes. La comunidad andaluza dispone de 5.300 metros cuadrados en el pabellón 5 de Ifema, en un expositor que tendrá como lema 'El Gran Escenario de la Alegría'.
En esta edición, dicha región presenta proyectos tales como 'Origen y Destino', con el foco en el V Centenario de la I Vuelta al Mundo en septiembre de 2022; 'Andalucía Deja Huella', como "apuesta fuerte" por el mundo del caballo; y 'Andalucía es Flamenco', ya que este arte "tiene mucho que ver con el éxito turístico de la comunidad".
También ha optado por evocar la luz y el mar el stand de la Comunidad Valenciana en el pabellón 7 del recinto ferial, que, en un espacio de más de 2.000 metros cuadrados, muestra la gran diversidad de oferta turística con la que cuenta la región: tolerancia y valores como LGBT, la especialización en festivales, además de las empresas tecnológicas ligadas al sector.
Una de las grandes apuestas de la feria por parte de las comunidades este año ha sido sin duda la sostenibilidad. Y, en esta línea, Navarra acude al evento apostando por un turismo responsable y consciente, que busca reflejar en su stand, realizado con materiales reciclables y con una iluminación de bajo consumo, todo ello de acuerdo con la acción de la agenda 2030 para el desarrollo sostenible.
Asturias también ha aprovechado la celebración de este evento para presentarse como destino de naturaleza y bienestar, seguro y sostenible. La cocina de paisaje y la candidatura de la cultura sidrera a patrimonio inmaterial de la Unesco tienen también su protagonismo en el stand asturiano.
Murcia también pone el acento este año en la sostenibilidad con un gran stand de 1.000 metros cuadrados, en los que destaca la diversidad de sus recursos naturales, culturales e históricos pueden ofrecer experiencias únicas a los visitantes.