El confinamiento por coronavirus tampoco es fácil para las mascotas: aunque está permitido sacarlas a pasear, también es cierto que esos paseos están limitados al tiempo imprescindible y que no debemos alejarnos innecesariamente de nuestra zona de residencia. En casos como este puede ser más frecuente que nuestro perro orine en casa, al producirse un cambio en sus costumbres y ciertas alteraciones en su día a día que pueden ponerlo más nervioso. En estos (y en otros) casos, ¿cómo hacer para que tu perro no orine en casa?
Lo primero que debemos hacer es comprender las razones por las que nuestro perro orina en casa. Es cierto que el nerviosismo excesivo puede llevarle a ello, aunque existen otros supuestos. Por ejemplo, que se trate de un cachorro y que todavía sea necesario educarle. Cuando se trata de un animal adulto, la cosa cambia: algunos perros no llegan a conseguir evitar orinar en casa, y ello probablemente suceda porque no hemos dado con la técnica adecuada para que se acostumbren.
Lo primero y más importante es comprender por qué lo hacen y, según recogen desde la web especializada en mascotas Kiwoko, los motivos más frecuentes son los siguientes:
En lo que respecta al coronavirus, está claro que poco podemos hacer en cuanto a la duración de los paseos, pero sí en cuanto a su periodicidad: no ayuda que cambiemos la rutina de las salidas para, por ejemplo, tener una excusa para salir de casa más a menudo, unos días sí y otros no. Ello no facilitará las cosas para tu mascota, que añadirá un elemento más a su cambio de rutina. Lo ideal es ceñirse a lo estipulado: tres paseos al día, durante el mismo horario.
Intenta también que la rutina de tu mascota cambie lo menos posible: que siga teniendo su propio espacio, que siga estando perfectamente atendido, que se le dedique el mismo tiempo de juego que se le dedicaría normalmente... De hecho, es muy posible que tu mascota necesite más atención ante esta nueva situación.
También es posible tener que recurrir a cierta dosis de disciplina: aunque debemos ser comprensivos, también hay que ser implacables a la hora de dejar claro que no es bien recibido (siempre que sea voluntario) orinar dentro de la casa. Igual de importante es el refuerzo positivo: prémiale cuando haga sus necesidades en el sitio correcto para que comprenda lo que debe hacer.
Además, existen soluciones complementarias, como los repelentes antimicción, que están indicados sobre todo para el caso de perros territoriales. Funcionan desprendiendo un olor que evita micciones en lugares no deseados. Por último, si se trata de un problema de salud, deberás consultar con tu veterinario qué pasos seguir.