¿Liberar a quien amas del sufrimiento o cumplir la ley?
Ese es el dilema al que se enfrentan miles de familias españolas: las que querrían ser libres para practicar la eutanasia o el suicidio asistido, pero de hacerlo, acabarían entre rejas. Hoy en día la eutanasia en nuestro país es un delito penado con hasta diez años de cárcel, una carga demasiado difícil de asumir, en vida, para el enfermo. La familia Lorente Tellaetxe sufrió esa duda existencial… y finalmente decidió cumplir la ley y no ayudar a Maribel Tellaetxe a morir. Ella quería acabar con su vida, lo dejó por escrito, pero no a ese altísimo precio: el de ser consciente de que sus hijos y su marido, acabarían en prisión si la ayudaban. Maribel murió de muerte natural, pero sus seres queridos siguen luchando porque la eutanasia sea despenalizada. El último intento lo protagonizó el PSOE, que llevó a la cámara una ley con tal fin, que contaba con el apoyo de Podemos. Pero la mayoría del PP y Ciudadanos en la mesa del Congreso, impidió que viera la luz.