El análisis del móvil de Esther López ha resuelto si se apagó antes de las seis de la mañana por la batería o por el golpe tras ser embestida por un vehículo. De hechos los investigadores de la UCO ya tienen un croquis de todos los movimientos del móvil de Esther y una aproximación de la hora del accidente. También los móviles de los últimos amigos que estuvieron con ella han ayudado a reconstruir sus pasos. Con eso y la autopsia definitiva que dará la hora de la muerte y la hora del accidente, el crimen quedará acotado y podrá resolverse sin especulaciones.
Si hubo un homicidio imprudente con fuga y denegación de socorro (sería raro que el golpe no hiciera parar al vehículo, incluso es raro que no se encontraran frenada), o si fue intencionado y por lo tanto están ante un asesinato. Lo que está claro es que Esther pudo tardar horas en sufrir un shock hipovolémico, con una hemorragia interna por las lesiones, con rotura de bazo entre otras, y las temperaturas bajo cero de la madrugada. Y lo que se desprende de esos datos es más revelador. Esther podía haberse salvado si hubiera sido auxiliada tras el atropello. También si la hubieran encontrado esa mañana en la cuneta. Las lesiones internas que sufrió aparentemente y a falta de algunos informes complementarios de la autopsia como el toxicológico, no parecen mortales.
La autopsia preliminar confirma que Esther López tenía una fractura de cadera y un latigazo cervical. Creen que fue golpeada por detrás justo en la curva cuando ella andaba en dirección al pueblo en el sentido de la marcha. Tendría que haber vuelto a casa por la calzada contraria para ver a los coches de frente pero si venía de la urbanización del Romeral, donde supuestamente se bajó del coche de su amigo Óscar, no es extraño que anduviera por la derecha con los vehículos por la espalda. Los investigadores creen que el golpe justo en la curva la proyectó hacia la cuneta donde fue encontrada bocabajo con la mochila colgada en su espalda.
El tipo de vehículo que buscan es un modelo todoterreno o un coche alto tipo pick up. Para ver todos los coches que pasaron por esa carretera en la madrugada han cruzado las antenas de telefonía y las imágenes de las cámaras del cruce de La Maña y del polígono. De noche apenas se ven luces pero ya tiene práctica en investigar modelos de coches a través de los faros. Lo hicieron en el caso de Diana Quer para llegar al vehículo del Chicle.
Uno de los coches sería el de la última persona que estuvo con Esther. Su vehículo fue revisado por dentro buscando restos biológicos en el maletero, pero por fuera, aunque no había signos aparentes, un golpe podría haber pasado desapercibido en la inspección. Es una hipótesis, que tras la discusión la cosa no quedara ahí o que fuera más violenta de lo que declaró. Sus distintas versiones tampoco ayudan. Las contradicciones de Ramón “el manitas” también lo han situado en el escenario del crimen. La jueza mantiene la condición de investigados de los sospechosos y hoy la directora de la Guardia Civil explicaba que hay varias líneas de investigación para llegar “al responsable o los responsables”. No se descarta a nadie.