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La madre de la menor de Uruguay que permanecía en el Consulado del país en Barcelona ha entregado este viernes la niña a los Mossos d'Esquadra para cumplir la sentencia por la custodia, ha explicado el Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC).
Unos minutos antes de las 13.00 horas de este viernes, un coche con los cristales tintados ha salido del parking del edifico y justo después los Mossos d'Esquadra han retirado la cinta policial que habían colocado alrededor de la entrada, ha podido constatar Europa Press.
A la salida del vehículo, los concentrados frente al Consulado para apoyar a madre han gritado consignas contra la decisión judicial de entregar la custodia al padre.
En declaraciones a los periodistas, la abogada de la mujer, Ester García, ha confirmado que han sido mossos de paisano, acompañados de psicólogas de la Dirección General de Atención a la Infancia y la Adolescencia (Dgaia), quienes han sacado a la niña del edificio consular.
Minutos antes de la salida del vehículo han llegado al lugar dos unidades Arro de los Mossos, y han creado un cordón policial para evitar que los manifestantes se colocarán frente a la salida del parking.
La jueza de Vielha ha dictado la mañana de este viernes que la madre debía entregar a la niña antes de las 14.00 horas, advirtiendo de que podía enfrentar un delito de desobediencia a la justicia si no lo hacía.
Frente al Consulado se han concentrado una treintena de personas en apoyo a la madre, que han gritado consignas como 'María no estás sola', y han exhibido un cartel con la inscripción 'La justicia patriarcal defiende abusadores' con representantes, entre otros, de Ca la Dona.
La mujer ha permanecido atrincherada con su hija en el edificio consular desde el viernes pasado, cuando estaba previsto que se hiciera el intercambio.
La entrega no se hizo en la fecha acordada y el cónsul criticó que la decisión judicial vulneraba el derecho internacional y la inviolabilidad de los edificios consulares.
La madre había denunciado al padre por malos tratos y abusos a la menor, y la denuncia quedó archivada, y en el juicio por la custodia los psicólogos destacaron que el hombre estaba preparado para ejercer la paternidad, mientras que de la madre subrayaron que "interfiere en el vínculo con el padre, con una práctica nociva" para su hija.