La Policía está trabajando en El Prat, Barcelona, después de encontrar en la calle Major, --cerca de donde vivía el presunto encubridor--, un cadáver que podría ser el de la joven.
Ha sido localizado en una nave abandonada. Han sido operarios de la limpieza quienes lo han encontrado bajo una manta. Agentes de la policía científica están en el terreno.
Janet Jumillas desapareció en Cornellá, Barcelona, el pasado 13 de marzo. El principal sospechoso de su desaparición y homicidio es Aitor G.P, quien fue enviado a prisión el pasado 9 de mayo tras negarse a declarar y negar cualquier implicación en los hechos.
También su amigo Cristian, acusado de un presunto delito de encubrimiento, fue detenido y posteriormente quedó en libertad provisional.
Durante el registro de los domicilios, los agentes encontraron restos de sangre en la casa de Aitor, a quien, como se ha conocido tras el levantamiento del secreto de sumario, los Mossos D’Esquadra realizaron un seguimiento. Tanto él como Cristian se acercaron a un contenedor cercano a la vivienda de Cornellà donde los investigadores creen que pudo ser asesinada Janet.
Allí, ambos habrían depositado bolsas de basura con diferente contenido, y entre lo que los Mossos encontraron se hallaban tres mochos de fregona manchados de sangre, una cuerda con pelos, vidrios de unas gafas y varios guantes de látex.
El análisis de las autoridades confirmaría después las sospechas: la sangre de las fregonas era de Janet Jumillas y, además, logaron determinar que los cristales encontrados tenían la misma graduación que la que necesitaba la víctima.