La amenaza del río Ebro se ciñe ahora sobre Zaragoza. Aunque todos los pueblos de los márgenes del Ebro siguen en vilo. En la ribera alta, la crecida ha dejado infraestructuras anegadas y miles de hectáreas de cultivo arrasadas. El Gobierno de Aragón, como el navarro, pedirá la declaración de zona catastrófica. Zaragoza está en vilo. Desde el aire el helicóptero de la policía capta la crecida a los pies de la Basílica del Pilar. Los agentes también recorren a pie el curso del río. Abren arquetas y revisan las zonas inundadas. Hay 200 desalojados por prevención. El Ebro ha superado ya los 5 metros de altura pero el pico de la crecida llegará entre las 4 y las 9 de la noche. Y así se mantendrá 36 horas. La previsión más optimista asegura que no llegará a los 6 metros. Pero será histórica. Vean qué fuerza lleva el agua. De 2200 a 2500 metros cúbicos por segundo de caudal. A partir de 1600 se considera una crecida extraordinaria.
Mires donde mires Novillas es hoy un gran lago. Más de 8 metros mide a su paso por este pueblo el Ebro. El río ha sumergido campos, instalaciones deportivas, carreteras...
Los 50 desalojados de Novillas ya han podido regresar a casa. Mientras la punta de la crecida avanzaba hasta Pradilla, donde, por suerte, los muros de contención han resistido el avance del agua.
El siguiente salto del Ebro ha sido Alagón, donde rompen una mota para aliviar el caudal.
También Navarra, con más de 60 municipios anegados, trata de recuperarse. El Ebro se resiste a marcharse de las calles de Buñuel. Así siguen. O de Tudela, donde los vecinos limpian y limpian sin parar.
Los Gobiernos de Navarra y Aragón pedirán la declaración de zona catastrófica los territorios afectados por la borrasca.