La Policía Nacional ha desarticulado una de las mayores redes de distribución de hachís, al detener a 27 personas. Operaban en Madrid, una vez cultivada la droga en Marruecos y transportada a España a través del estrecho de Gibraltar. En los registros, los agentes intervinieron más de 550 kg de hachís, 100.000 euros en efectivo, armas y vehículos.
La banda adoptaba numerosas medidas de seguridad y estaba perfectamente organizada. Una vez que la droga llegaba de Marruecos, se almacenaba en “guarderías” en la Costa del Sol. Después trasladaban la mercancía a Madrid, para distribuirla principalmente al norte de España.
La investigación comenzó en mayo de 2018, y todavía continúa abierta a pesar de haber detenido a 27 personas. La Policía quiere encontrar a algunos de los mayores compradores, de los que muchos vendían también al por menor la mercancía. Los detenidos han pasado a disposición judicial por delitos de tráfico de drogas, pertenencia a organización criminal, blanqueo de capitales y tenencia ilícita de armas.
Además, la organización transportaba a Marruecos potentes fármacos que utilizan para fabricar el “karkubi” o la llamada “droga de los pobres”, una mezcla de hachís y psicotrópicos, que provoca alucinaciones y conductas psicópatas.