Continúa la búsqueda de Marta Calvo en Manuel (Valencia) en la casa donde Jorge Palma, el principal acusado, confesó haberla descuartizado.
Está previsto que se rastreen las inmediaciones con perros adiestrados y se desmonten tuberías y desagües. No se habían revisado hasta ahora porque no se sabía que Jorge Palma pudo descuartizar el cadáver de Marta y utilizar ácido, hasta que confesó.
Una de las mujeres que estuvo con Jorge meses antes ha reconocido la casa de Lolleria pero creen que no llevó a Marta a esa vivienda porque la utilizó su madre. Casualmente, llegó para verle al día siguiente de la muerte de Marta y declaró que estuvo enferma y Jorge la cuidó todo el tiempo. Eso sorprendió a los investigadores porque significa que tuvo pocas horas para comprar herramientas, descuartizar el cuerpo, repartirlo por contenedores de tres pueblos y limpiar.
Horas antes de quedar con Marta, Jorge contactó con otra mujer que ya le conocía, pero ella contó a la Guardia Civil que lo rechazó porque estaba muy nervioso y le dio miedo.
Ni siquiera la muerte de Marta evitó que Jorge contactara con al menos tres mujeres más cuando ya se sabía buscado.
Por esa obsesión del detenido, han incluido en la investigación la desaparición de Wafa la joven de 19 años en Carcaixent.