La exesquiadora y medallista olímpica Blanca Fernández Ochoa, de 56 años de edad, fue vista por última vez el 24 de agosto en la localidad madrileña de Aravaca, donde reside con su hermana.
Había acudido a casa de su hermana a dejarle el perro. Explicó que iba a pasar cuatro días en el norte haciendo senderismo. Se marchó con su coche, un Mercedes clase A, y sin su teléfono móvil, algo que en palabras de su cuñado Adrián Federigui era "habitual" en ella.
El 29 de agosto, tras varios días sin noticias de Blanca Fernández Ochoa, su hija Olivia Fresneda denuncia la desaparición de su madre en el municipio madrileño de Las Rozas. Se ejecuta cuando los familiares "creen conveniente", justifica a los medios el jefe del operativo de búsqueda de la deportista, Pedro Herranz.
Sobre ello, Herranz ha explicado que la familia hizo anteriormente sus "gestiones" para tratar de localizarla.
Una vez puesta la denuncia es cuando Policía Nacional y Guardia Civil se ponen a trabajar "codo con codo" para dar con el paradero de la deportista madrileña.
El 31 de agosto, la Policía Nacional alerta a través de su cuenta de Twitter de la desaparición de Blanca Fernández Ochoa, donde solicita la "máxima difusión" de la noticia.
Los medios de comunicación se hacen eco de la noticia sobre la desaparición de la que fuese la primera mujer española en ganar una medalla en los Juegos de Invierno.
Sobre las 13 horas, Luis, un hermano de la desaparecida, encuentra el vehículo en el que viajaba Fernández Ochoa en el Parque Natural de las Dehesas, un paraje muy frecuentado por senderistas y aficionados al 'trekking'. Concretamente, en un aparcamiento habilitado.
Desde el aparcamiento, poco después de las 16 horas comparece ante los medios de comunicación por primera vez su cuñado Adrián Federigui, que informa que la única hipótesis que baraja la familia es que haya sufrido un accidente y no haya podido pedir auxilio al encontrarse sin su teléfono móvil.
Asimismo, informa de que la Policía se ha desplazado hasta la zona para analizar el vehículo, que según confirma Herranz una hora más tarde, "puede llevar aparcado varios días". Se produce una inspección ocular del coche donde se recogen varios vestigios.
Herranz destaca que la principal hipótesis que se baraja "es una desaparición voluntaria" por lo que no se sospecha que sea "de riesgo ni forzada". Quizás "haya sufrido un bajón y haya decidido tomarse unos días de aislamiento", explica.
Este mismo día y tras la localización del vehículo, se inicia un dispositivo de búsqueda coordinado por la Guardia Civil y la Policía Nacional con varias dotaciones del grupo GERA de los bomberos de la Comunidad de Madrid y agentes forestales de la región, incluido un helicóptero.
En el caso de no encontrar a Blanca Fernández Ochoa, se procederá a la batida con voluntarios a partir del lunes 2 de septiembre, según ha comunicado Herranz a los medios, quien ha solicitado además a todos aquellos que quieran participar que durante el domingo que no se acerquen a la zona para no contaminar y poder ayudar en la búsqueda a los perros guías.