En los últimos días se ha comparado en multitud de ocasiones al coronavirus con la gripe común. La realidad es que no son lo mismo. Contra la gripe sí existe vacuna, para el coronavirus, de momento, no. Los especialistas llaman a la calma. El coronavirus es altamente contagioso pero en 8 de cada 10 casos cursa de forma leve: fiebre, dolor de garganta y dificultad respiratoria en casos extremos que deriva en una neumonía. Los pacientes con otras patologías pueden necesitar el ingreso en la Unidad de Cuidados Intensivos.
Las secreciones respiratorias de los pacientes infectados son el verdadero foco de contagio. “Cuando esas secreciones te llegan a la boca, a la nariz, a los ojos… Las probabilidades de transmisión son muy elevadas”, ha explicado Carlos Jiménez, presidente de SEPAR.
En una situación de pandemia, hay que prestar atención a lo que tocamos. En superficies metálicas, el virus permanece entre 10 y 12 horas pero la peligrosidad más alta radica en el contacto entre personas. “Es importante que nos sensibilicemos de esta situación, hay que evitar aglomeraciones y salir a la calle si no es estrictamente necesario”, señala Jiménez.
Siempre desde la calma, aunque estemos sanos hay que atender a las recomendaciones de los expertos. La salud de muchas personas está en riesgo. “Las personas mayores de 70 años, personas con enfermedades crónicas, respiratorias crónicas, cardiovasculares, diabetes…”, advierte el experto. Y atención al tabaquismo. “Un fumador tiene más posibilidades de ser infectado que un no fumador”.
La detección precoz al inicio de una epidemia es vital. La acción inmediata es fundamental para evitar más contagios.