La ministra de Educación, Isabel Celaá, ha presidido hoy una reunión telemática con todos los consejeros autonómicos del ramo. El objetivo básico: cómo evaluar a los más de ocho millones de estudiantes de enseñanzas no universitarias que permanecen confinados en casa por la pandemia del coronavirus. Los universitarios serán evaluados de manera telemática y no parece ya factible que vuelvan a las aulas.
Isabel Celaá ha comparecido desde La Moncloa para informar de las medidas tomadas por el departamento de educación en relación a la crisis del coronavirus.
Lo primero que ha querido mandar es un “mensaje de calma, tranquilidad y serenidad”, ya que asegura que “todos los estudiantes van a poder culminar el curso escolar. No puede suponer la pérdida del curso por causa relacionada por el COVID-19, es de justicia agradecer el enorme esfuerzo los niños y jóvenes, el esfuerzo que están haciendo para seguir aprendiendo desde sus casas”
Los puntos del acuerdo educativo entre Gobierno y CCAA: no se alarga el curso más allá de junio, no habrá actividad lectiva en verano, centrarse en competencias imprescindibles y la repetición de curso será "muy excepcional"
1- Se mantiene la duración del curso escolar. Continúa la educación adaptada. En verano se apoyarán actividades de refuerzo, combinadas con actividades lúdicas.
2- Se usaran diferentes herramientas de educación a distancia, apoyando a quienes tengan dificultad de acceso. Sustituimos clases presenciales por una a distancia, que compone distintas herramientas para llegar a los alumnos.
3- Se flexibilizará el currículo y programaciones didácticas. Cuidando no sobrecargar al alumnado. Se usará el tercer trimestre para el repaso, refuerzo, con actividades globalizadoras.
4- Se adaptará la evaluación, promoción y titulación. La evaluación será continua y acentuará su carácter diagnóstico y formativo en todas las etapas y enseñanzas. Valorar los avances realizados y el déficit que hayan podido producirse en cada uno de los alumnos con objeto de preparar las medidas de refuerzo necesarias y reprogramar el curso 20-21. La repetición es la excepción. Es necesario hacer una evaluación y una promoción equitativa, así que la repetición de curso será una medida muy excepcional que deberá estar sólidamente argumentada y acompañada de un plan preciso de recuperación individualizado.
El Gobierno y las CCAA han acordado este miércoles en la Conferencia Sectorial de Educación permitir la posibilidad de abrir los colegios en julio para dar de forma voluntaria clases de refuerzo a los alumnos con necesidades educativas, tal y como reclamaban algunas organizaciones como Save the Children. La idea es recibir clases en julio de apoyo sin avanzar en el temario, para lo que también se han pedido medios.
Según ha informado el Ministerio, Celaá y los consejeros de educación han decidido no prolongar el curso más allá de junio, como estaba previsto, aunque se permitirá que las comunidades autónomas organicen o apoyen la realización de actividades de refuerzo en el periodo estival "en formas diversas y combinadas con actividades lúdicas". Estas actividades pueden estar promovidas incluso por ONG o asociaciones "contando con el concurso del voluntariado y en contacto con los centros educativos y sus docentes".
La "regla general" será la promoción automática y la "excepción" será repetir, como ya defendía el Consejo Escolar del Estado, que no apostaba por un aprobado general. Lo que no se haya podido dar este curso se hará en el siguiente. La evaluación será flexible, por lo que se tendrá en cuenta lo que han hecho en casa pero teniendo en cuenta que no todos los alumnos tienen las mismas posibilidades de hacerlo.
Por lo que se deduce de lo inicialmente acordado, que los alumnos promocionen salvo excepciones, la mayoría de los alumnos pasarán pues de curso, pero no con la misma nota porque habrá evalucación de lo realizado durante el curso. Los profesores tendrán que decidir la calificación de cada estudiante en base a las notas obtenidas durante los dos primeros trimestres, el periodo en el que las clases fueron presenciales. Y lo que hayan hecho en casa solo se evaluará en caso positivo, tal y como apunta El País.
Las reacciones a la propuesta no se han hecho esperar y desde la Asociación de Colegios Privados e Independientes afirman: "Apoyamos cualquier propuesta de refuerzo y ayuda para los estudiantes porque entendemos que administraciones y colegios debemos garantizar el derecho a la educación del niño y tener en cuenta las circunstancias y dificultades de las familias en estos momentos”
Manifiestan su desacuerdo con el aprobado general ya que “no es la mejor propuesta para toda la población escolar, pues conllevará desincentivar a aquellos alumnos que sí están avanzando contenidos y siguiendo sus clases no presenciales", señalan fuentes de CICAE a Informativos Telecinco.
"Los colegios privados creemos que por el bien del bienestar emocional e intelectual de los estudiantes, estos deben continuar con sus estudios, avanzar en sus aprendizajes y afrontar retos educativos. Los profesores tienen muchas evidencias de su rendimiento académico en el primer y segundo trimestre, así como herramientas y fórmulas para valorar sus aprendizajes en el tercer trimestre, siendo por supuesto más flexibles por la situación inédita en la que nos encontramos", añaden desde CICAE.
Pedro Caballero, presidente de CONCAPA (Confederación Católica Nacional de Padres de Familia y padres de Alumnos) señala sobre las medidas aprobadas: "Valoramos positivamente que ningún alumno repita por esta situación excepcional en la que vivimos, pero apostamos porque se valore el esfuerzo inmenso del profesorado, del alumnado, y sus familias, favoreciendo que esta última evaluación sirviera como una evaluación continua para la recuperación de materias y la mejora de nota de nuestros alumnos"
En cuanto a la apertura de los centros es julio para reforzar de forma voluntaria: "No vemos posibles mejoras educativas abriendo los centros escolares en julio, tanto si son actividades lúdicas, como si son de refuerzo, dado que saldremos de un confinamiento de casi dos meses, y se necesita el período estival para rebajar el nivel de estrés acumulado, apostando claramente para que se comience lo antes posible a trabajar en el calendario escolar del próximo curso escolar, que debería empezar (siempre que se den las condiciones necesarias de seguridad) en el primer día posible del mes de septiembre"
Por su parte desde CEAPA, su presidenta, Leticia Cardenal, reconoce estar satisfechos con lo aprobado: "En líneas generales estamos muy de acuerdo con lo que ha transmitido esta tarde la ministra de Educación. Las medidas van en la línea de lo que venimos pidiendo desde CEAPA. Estamos muy satisfechos"
Se cumple un mes de la suspensión de las clases presenciales por el Estado de Alarma. Hay ocho millones de estudiantes no universitarios confinados en sus casas.
El Consejo Escolar del Estado, integrado por representantes de los diferentes sectores de la comunidad educativa, también recomienda que sean evaluables las tareas que los estudiantes están haciendo en casa, durante el aislamiento. Sin embargo, pide tener en cuenta las "condiciones tecnológicas y de conectividad" de los hogares. Buscan así que la "brecha digital" no suponga un motivo para "la evaluación negativa de los aprendizajes y las competencias".
La petición de eliminar o reducir las repeticiones este curso, promovida inicialmente por organizaciones de estudiantes, ha sumado apoyos en las últimas semanas. La ONG Save The Children ha remitido una carta a la ministra Celaá donde reclama un acuerdo con las comunidades autónomas para que la repetición sea algo "casi residual, como ya lo es en la mayoría de países europeos".
La misiva está respaldada por profesores universitarios, expertos en educación y organizaciones como la Confederación Española de Asociaciones de Madres y Padres de Alumnos CEAPA, que defiende no evaluar las tareas escolares realizadas durante el confinamiento. También por la Confederación Estatal de Asociaciones de Estudiantes CANAE, que planteó en el Consejo Escolar la eliminación "excepcional" de las repeticiones.
"En nuestro sistema educativo, casi uno de cada tres estudiantes (28,7%) está en un curso inferior al que le corresponde. En este sentido, nos alejamos mucho de los países de nuestro entorno (16% Francia, 13% Italia, 4,4% Grecia, 3% Finlandia, 2,8% Reino Unido, 0% Noruega)", sostienen desde CANAE.
En la reunión entre el Estado y las comunidades del pasado 25 de marzo, se fijaron nuevas fechas para la denominada Prueba de Bachillerato de Acceso a la Universidad (EBAU), aplazando su calendario entre el 22 de junio y el 10 de julio.
Además, los consejeros de las comunidades autónomas aceptaron la propuesta presentada por la ministra Celaá para cancelar las pruebas de evaluación diagnóstica para los estudiantes 3º y 6º de Primaria y 4º de la ESO. También hubo consenso en flexibilizar las prácticas de enseñanzas de Formación Profesional en el centro de trabajo, necesarias para superar el curso, ampliando el periodo establecido en el calendario escolar