La localidad sevillana de Coria del Río, una de las localidades con mayor incidencia del brote de Fiebre del Nilo que afectó a gran parte de Andalucía durante el verano de 2020, ha decidido apostar por los murciélagos para eliminar a los mosquitos antes de la temporada de mayor actividad del insecto que transmite el virus, del género 'Culex'.
Con el fin de eliminar su población se han distribuido cuarenta refugios de murciélago en la localidad, en una acción puesta en marcha por el Ayuntamiento que puede hacer que cada mamífero volador elimine unos 3 000 insectos cada noche, según publica el 'Diario de Sevilla'.
El proyecto contratado como complemento a otros por el Ayuntamiento de Coria ha sido llevado a cabo por BRUTAL y los refugios han sido instalados por la empresa Living Doñana. Sara Pinto, CEO y bióloga de BRUTAL a cargo del proyecto junto con Álvaro Luna, especifica a Informativos Telecinco que se hará un seguimiento de la población y se realizarán más acciones de cara a aumentar su eficacia.
Según los datos de la Red Nacional de Vigilancia Epidemiología, en 2020, se contabilizaron un total de 76 casos de Fiebre del Nilo, 40 confirmados y 36 probables, con 71 casos en Andalucía, 57 en Sevilla y 14 en Cádiz, y cinco en Extremadura. El virus provocó 72 hospitalizaciones y siete muertes en Andalucía, cuatro en Sevilla (3 hombres y 1 mujer de 70 a 85 años) y tres en Cádiz (2 hombres y 1 mujer de 59 a 87 años). A nivel global, la mediana de edad durante el brote fue de 64,5 años, con mayoría de hombres.
Además, un programa puesto en marcha por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación detectó hasta 147 caballos afectados con el virus en la mayoría de provincias andaluzas y en otras del territorio español, como Castellón. Además, se notificó la presencia del virus en ocho aves mediante PCR.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), el virus del Nilo Occidental puede causar una enfermedad mortal del sistema nervioso. Se encuentra por lo común en África, Europa, el Oriente Medio, América del Norte y Asia occidental. Se mantiene en la naturaleza mediante un ciclo que incluye la transmisión entre aves y mosquitos. Puede infectar a los seres humanos, los caballos y otros mamíferos. Pertenece al género flavivirus y al complejo antigénico de la encefalitis japonesa, familia Flaviviridae.
El virus se mantiene en la naturaleza mediante un ciclo de transmisión mosquito-ave-mosquito. Generalmente, se considera que los vectores principales son los mosquitos del género 'Culex', en particular 'Culex pipiens'. El virus se mantiene en las poblaciones de mosquitos gracias a la transmisión vertical (de los adultos a los huevecillos).
La infección del ser humano suele ser el resultado de las picaduras de mosquitos que se infectan cuando pican a aves infectadas, en cuya sangre circula el virus durante algunos días. El virus pasa a las glándulas salivales del mosquito, que cuando pica puede inyectar el virus a los seres humanos y los animales, en los que luego se multiplica y puede causar enfermedad. Se transmite también por el contacto con otros animales infectados o con su sangre u otros tejidos. El periodo de incubación suele durar entre 3 y 14 días.