La Autoridad Judicial ha confirmado que la identidad del cuerpo sin vida encontrado encontrado a las 10.30 horas del sábado por un "paseante" en una zona próxima al polígono Tuduero corresponde a Esther López de la Rosa, la mujer de 35 años vecina de Traspinedo (Valladolid) desaparecida desde el día 12 de enero.
El cadáver fue encontrado en esta zona y no estaba enterrado, por lo que no se descarta que pudiera haber sido traslado en las últimas horas hasta este lugar, que ya había sido peinado en las batidas llevadas a cabo por los vecinos de este municipio.
La delegada del Gobierno, Virginia Barcones, y el coronel de la Guardia Civil, Miguel Recio, habían comparecido ante los medios de comunicación para informar del hallazgo del cadáver de una mujer que, según apuntaron por la mañana, era compatible "en un porcentaje muy elevado" con el de Esther López de la Rosa, quien había sido vista por última vez en la madrugada de 12 al 13 de enero.
El coronel de la Guardia Civil no pudo asegurar si el cadáver encontrado por un vecino, que estaba paseando por la zona, ha podido ser trasladado en las últimas horas hasta el lugar donde ha aparecido ya que, como así ha puntualizado, "hay que esperar a tener los resultados de la autopsia", aunque sí que ha apuntado que se ha localizado en una zona "muy próxima" donde se hizo una búsqueda en días pasados.
"Estaba en superficie y no puedo asegurar si lo han dejado. Hacer elucubraciones en estos momentos es complicado", ha enfatizado el coronel de la Guardia Civil, quien ha apuntado que hay que ser "muy minuciosos y hay que hacerlo lo mejor posible para recabar todas las pistas" que permitan esclarecer este hecho.
La delegada del Gobierno ha mostrado su "confianza" en las actuaciones que ha llevado a cabo la Guardia Civil y ha asegurado, que al igual que los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado "han estado a disposición para encontrar a Esther, también lo van a estar ahora para esclarecer los hechos".
La vecina de Traspinedo, desaparecida el 12 de enero, era buscada desde que sus padres presentaran denuncia el pasado día 17, después de que no diera señales de vida tras haber estado la noche de su desaparición viendo en un bar del pueblo el partido de la Supercopa entre el Barcelona y el Real Madrid y luego continuara la fiesta con unos amigos en casa de uno de ellos y más tarde en unas bodegas.
Esa era la versión que habían facilitado las dos personas con las que estuvo esa noche antes de que se le perdiera el rastro, dos vecinos de Traspinedo, Óscar y Carlos, que viajaron con ella en el coche del primero de regreso a casa y que, según relataron con algunas contradicciones, se detuvo ante el restaurante La Maña.
En el relato ofrecido, Carlos se apeó del vehículo para ir a su casa y luego Óscar y Esther discutieron porque ella quería seguir de fiesta y él la dejó en las inmediaciones, sin que se volviera a saber nada más de la mujer en los últimos veinticuatro días.
Las investigaciones desde entonces se centraron en ambos vecinos y también en un tercer investigado, Ramón G. (El Manitas), pesquisas en las que la Guardia Civil, además de rastrear el municipio mediante batidas en las que habían participado cientos de voluntarios, había tomado muestras de la vivienda del tercero y de los vehículos de este y de Óscar, sin resultado positivo, y había centrado también su investigación en los teléfonos
El único de los investigados que había permanecido privado de libertad es Ramón G cuya detención hubo de prorrogarse durante otras 72 horas aunque finalmente la titular del Juzgado de Instrucción número 5 le dejó en libertad provisional ante la falta de pruebas que atestiguaran su implicación en los hechos.