Las autoridades de la región de Trentino, en Italia, han condenado a muerte a un oso pardo que atacó a un padre y su hijo en una ruta de senderismo. La sentencia ha levantado polémica y provocado el rechazo de diversas organizaciones animalistas, que exigen que se revierta la medida.
El incidente se produjo el último lunes. Fabio Misseroni, de 59 años, y su hijo Christian, de 28, recorrían un sendero en el Monte Peller cuando se toparon con un oso. Según dijo por el joven a la cadena CNN, el animal le mordió a él y a su padre, a quien rompió una pierna. Únicamente cuando el joven comenzó a saltar y aplaudir el animal cesó su ataque y se marchó del lugar.
Maurizio Fugatti, gobernador de Trentino, firmó una orden para ubicar al oso que protagonizó el incidente y sacrificarlo, como indican las normas del Instituto Nacional de Protección e Investigación Ambiental de Italia. Las ropas de los excursionistas fueron sometidas a pruebas de ADN para identificar al oso.
Organizaciones en defensa de los derechos animales como Animalisti Italiani y el Fondo Mundial para la Naturaleza han pedido que se detenga la orden de ejecución hasta que se determine si el incidente fue provocado o no por los afectados. Una petición del segundo grupo para salvar al animal ha recogido casi 15.000 firmas. El Ministerio del Medio Ambiente italiano también se opone a la muerte del oso y señala que pudo tratarse de una hembra protegiendo a sus cachorros.