Uno de los grandes quebraderos de cabeza para miles de conductores en España y, sobre todo, para quienes se examinan del carnet de conducir o acaban de obtener su licencia, es cómo trazar una rotonda de forma correcta. Son muchos los accidentes que se producen en este tipo de tramo y también los sustos que nos llevamos casi a diario, sobre todo cuando la densidad del tráfico es elevada. En general, lo mejor es circular por el carril de la derecha, aunque esto no siempre es posible. Las cosas se complican cuando circulamos en el interior. Para evitar accidentes y ganar seguridad, toma nota de cómo trazar un rotonda correctamente.

Se trata de una de las lecciones básicas cuando aprendemos a conducir y, sin embargo, muy pocas personas circulan correctamente dentro de la rotondas. Tanto es así que muchas veces se convierten en una suerte de 'espacio sin ley' donde, allá de lo que nos indica la Dirección General de Tráfico (DGT), impera la ley del más fuerte. Tanto es así que estos puntos de la carretera se han convertido en unos de los más accidentados de la lista de tramos de carretera de todo tipo.

Tal y como afirman desde la Inspección Técnica de Vehículos o ITV, "el problema siempre está en que no sabemos en qué carril debemos colocarnos en cada momento". A evitar problemas, la idea que debe imperar a la hora de laborar nuestra maniobra al volante es tener claro qué salida vamos a tomar. En ese sentido, dentro de una rotonda siempre tiene prioridad quien ya circula dentro de ella: una vez que entremos, habiendo cedido el paso a los conductores que se encuentran en su interior, lo mejor es utilizar siempre el carril de la derecha. De este modo, simplemente tendremos que escoger la salida elegida, señalizar la maniobra con el intermitente y salir de la rotonda.

El problema empieza cuando los carriles están delimitados y tenemos que escoger un carril interior. Cuando esto ocurra, la regla más importante consiste en saber que bajo ningún concepto podremos salir desde un carril interior y tomar nuestra salida directamente. Así, primero deberemos acceder al carril de la derecha (el que se encuentra en la cara más exterior de la rotonda) y solo cuando ya nos encontramos circulando por este carril, podremos salir normalmente de ese tramo, siempre señalizando este movimiento antes de realizarlo.

Así, según resume la ITV, en caso de que queramos cambiar de sentido o girar a la izquierda cuando debemos entrar en la rotonda tomando el carril izquierdo, "una vez dentro de la rotonda, nos incorporaremos al carril externo o derecho en el momento oportuno cuando vayamos llegando a nuestra salida". Eso sí, "siempre con la antelación suficiente y las señales oportunas para no obstaculizar el tráfico y evitar cualquier tipo de incidente". En el mismo sentido, cabe recordar que los vehículos del carril derecho siempre tienen prioridad. Debemos tener eso en cuenta a la hora de pedir permiso para trasladarnos a este carril como primer paso para poder salir de la rotonda.

Por último, en caso de que intención sea continuar en sentido recto, lo mejor es utilizar el carril derecho en todo momento, señalizando con las luces intermitentes el momento de la salida o cualquier otro movimiento que vayamos a realizar.

En cuanto a las turbo rotondas, tal y como recuerda la DGT, para circular correctamente en ellas es fundamental seleccionar el carril adecuado antes de entrar, porque cada carril lleva a distintas salidas. En ellas existen líneas continuas que llevan al conductor hacia su salida, sin que pueda traspasarla bajo ningún concepto. Las marcas viales y los paneles te indicarán previamente qué carril elegir para llegar a tu destino.