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Canadá ha dejado de buscar a los marineros desaparecidos tras el naufragio del Villa de Pitanxo debido a la mala mar. Esa mala climatología, con olas de 10 metros y vientos de 80 km/h es la que pudo provocar el hundimiento del pesquero gallego. El mar lo engulló en solo 13 minutos.
Desde que la tripulación del Villa de Pitanxo pidió ayuda hasta que el barco se hundió solo pasaron 13 minutos. “El hundimiento fue muy súbito, muy rápido”, ha afirmado Javier Touza, presidente de los armadores de Vigo.
Si pudieron ponerse o no los trajes de emergencia sigue siendo una incógnita. “Si es un accidente muy repentino el poner el traje lleva un tiempo”, explica un experimentado marinero.
La respuesta sólo la tienen los 3 supervivientes, el patrón Juan Padín, su sobrino Eduardo Rial y un marinero de Ghana, Samuel Kwesi Koufi. Los tres siguen en shock a bordo de uno de los barcos de rescate.
El Villa de Pitanxo estaba recogiendo un copo muy bueno. El capitán estaba en el puente de mando dirigiendo a la mitad de la tripulación, que estaba en popa recogiendo las capturas mientras la otra mitad estaba en el interior del pesquero descansando, según informa La Voz de Galicia. Hacía muy mala mar, con enormes olas pero no peores que otras veces.
De repente, mientras tiraban de los cables que ayudan a la máquina a subir las capturas, un golpe de mar entró por la rampa de popa llenando el barco de agua en un abrir y cerrar de ojos. En ese momento, los compartimentos de cubierta están abiertos y hay mucho peso y aparejos en la cubierta. Todo eso pudo contribuir al hundimiento del barco en unos minutos.
Si el naufragio se confirma que ocurrió así, explicaría porque han sobrevivido quienes estaban en el puente de mando. Los primeros en caer al agua serían los marineros que estaban faenando y los del interior puede que ni si quiera pudieran salir.
Además, algunos expertos señalan que el barco no llevaba mucha carga en sus bodegas. Eso hace que con mala mar el cargamento se mueva y el buque se desestabilice. En este aspecto, también pueden influir los tanques de combustibles, que si no están muy llenos también pueden contribuir a desestabilizar la embarcación cuando las condiciones meteorológicas con malas. No obstante, ninguna de estas dos razones por si solas son suficientes para provocar el hundimiento.
Canadá no seguirá buscando a los desaparecidos 36 horas después del naufragio del Villa de Pitanxo. Las durísimas condiciones climatológicas hacen imposible encontrar supervivientes.
A la tripulación del pesquero español se les considera ya oficialmente desparecidos en el mar. Hay tres supervivientes y nueve fallecidos.