¿Año de sequía? Trucos y consejos para ahorrar agua en nuestros hogares

  • Ahorrar agua se vuelve imperativo en un año en el que la sequía amenaza a España

  • Los embalses han perdido casi 10.000 hectómetros cúbicos respecto a la media de los últimos 10 años

  • Nuestra forma de consumir agua en el hogar puede ayudar a reducir el uso de este recurso vital

Ahorrar agua y ser racionales en nuestro consumo de este recurso es una máxima que siempre debería cumplirse, pero a veces la única forma de que tomemos conciencia de un problema es que vivamos sus consecuencias en primera persona. Este 2022 existe una amenaza real de sequía en España: los embalses han perdido cerca de 10.000 hectómetros cúbicos respecto a la media de la última década y las lluvias parecen no llegar. Por eso vivimos un momento clave para aprender a hacer buen uso de ese elemento imprescindible para la vida en nuestro Planeta. ¿Cómo podemos ahorrar agua? ¿Qué trucos nos permitirán consumir menos?

Trucos y consejos para ahorrar agua

La mejor forma de ahorrar agua es ser plenamente conscientes de cómo hacemos uso de este recurso y de cuándo sobrepasamos los límites de lo necesario o racional. Pero, además, existen algunos trucos que pueden ayudarnos en esta tarea. Estos son los consejos de Ayuda en Acción para hacer un uso correcto del agua en nuestros hogares:

  • Sé consciente. Se trata de no mirar hacia otro lado y tomar conciencia de cada ocasión en que hagamos uso del agua, analizando de qué forma lo hacemos. Cada vez que abras un grifo, piénsatelo dos veces y procura usar solo la cantidad necesaria, sin derrocharla por gusto. El Planeta (y también tu bolsillo) te lo agradecerán.
  • Elige la ducha en lugar del baño. Sabemos que bañarse es todo un placer, pero consume mucha más agua que una ducha. Claro está, en función de la ducha, porque si alargamos su duración hasta el infinito estaremos provocando el mismo gasto excesivo. En principio, de media, un baño gasta 15 veces más de agua que una ducha. Pero tampoco debemos dormirnos en los laureles bajo la alcachofa.
  • Cierra el grifo mientras… te lavas los dientes, te afeitas o te enjabonas las manos. Hagas lo que hagas, no es necesario que el agua siga corriendo si no estás haciendo uso de este recurso en ese preciso instante. También puedes reducir la presión para reducir el gasto de agua por segundo.
  • Recuerda que el inodoro no es una papelera. Hemos adquirido la (mala) constumbre de usar el inodoro como si de una papelera se tratase, tirando de la cisterna cada vez que tiramos un papel o cualquier otro residuo. Evítalo: cada vez que tiras de la cisterna gastas entre 9 y 10 litros de agua. Además, recuerda hacerte con un sistema de cisterna de media descarga. También puedes limitar la capacidad de la cisterna introduciendo una botella vacía que impida que el tanque se llene por completo. Así, cada descarga será menor.
  • Evita las fugas de agua. Si existe alguna avería en tu hogar que provoque una pérdida de agua constante, arréglala cuanto antes. No solo es un gasto innecesario: también puede resultar peligroso.
  • No enjuagues los platos antes de meterlos en el lavavajillas. Es preferible usar una servilleta, paño, cubierto... para tirar los restos de alimento a la basura, introduciendo los platos sin enjuagar. El lavavajillas está diseñado para eliminar la suciedad incrustada.
  • Usa lavadora y lavavajillas a carga completa. Es una manera de ahorrar mucha agua. Ten en cuenta que el consumo de la lavadora por sí solo representa alrededor del 20 por ciento de todo el gasto de agua en el hogar. Si puedes evitarlo, no uses programas de lavado con prelavado.
  • Usa reductores de caudal o aireadores en los grifos. Estos dispositivos te permitirán ahorrar mucha agua, al reducir el caudal de líquido hasta un nivel suficiente y no excesivo. Lo aconsejable para grifos son 8 litros por minuto y para ducha 10 litros por minuto. Del mismo modo, los aireadores sirven para introducir aire en el chorro de agua, consiguiendo un ahorro del 40 o el 50 por ciento.
  • Hazte con electrodomésticos eficientes energéticamente. Siempre que tengas que sustituir un electrodoméstico, elige un modelo eficiente energéticamente. Son un pco más caros, pero supondrán un importante ahorro en luz y agua.
  • Riega por la noche. Así evitarás que se pierda humedad por evaporación.