Fuentes de la dirección general de Aguas de la Generalitat Valenciana, han indicado que el origen de la presencia de esta bacteria en las playas sería un "problema de acequias", relacionado con casas aisladas que no están conectadas a la red de saneamiento.
En las últimas semanas, han sido varios los episodios de presencia de bacterias que han obligado a cerrar playas en el entorno de la ciudad de Valencia. De hecho, este jueves se tuvieron que cerrar las playas de la Malva-rosa y la Devesa de Valencia por esta misma cuestión y durante el mes de junio también se han cerrado playas en municipios como Alboraia.
El pasado viernes, la Conselleria anunció que había intensificado las pruebas para detectar el origen de los vertidos que provocaron el cierre de las playas de Malva-rosa y Devesa. Desde la Generalitat tienen previstos 4.000 muestreos.
El director general de Aguas, Manuel Aldeguer, explicó que tanto la Administración autonómica como la local realizan muestreos periódicos para garantizar la calidad del agua y aseguró que estos episodios puntuales de corta duración responden "al cumplimiento de los estrictos controles de ambas administraciones".
"En el momento en que desaparece la bacteria, algo que sucede muy rápido porque dura de 2 a 4 horas, no tiene por qué permanecer la playa cerrada", explicó Aldeguer.