El Chicle ha pedido la palabra en el alegato final del juicio en el que se le pide prisión permanente revisable. Su abogado ya ha reconocido a la vista de los hechos que cometió homicidio doloso. Los alegatos de la fiscalía y la acusación fueron demoledores: maldad absoluta, manipulador, depredador sexual. Ahora el Chicle ha querido hacer uso de su palabra para pedir de nuevo perdón a la familia de Diana Quer. Dista mucho este Chiche del que se reía en la reconstrucción de los hechos.

"No tengo nada más que decir que lo que ha dicho mi abogada que es pedir perdón". No coincide eso con lo que se ha visto en el juicio, una falta de arrepentimiento clara, más aún cuando El Chicle intentó volver a hacer lo mismo que lo que le hizo a Diana a una chica de Boiro. Con lo que está claro que el instinto es lo que le mueve. Y no solo eso. El Chicle intentó engañar a los investigadores y también manipuló el móvil para no ser capturado.

Es la segunda vez que pide perdón a la familia de Diana, aunque nunca se ha referido a ella por su nombre. La primera vez se refirió a ella como "La chica de Madrid", fue en el juicio por el intento de rapto el 25 de diciembre de 2017 a una chica en Boiro. Fue el 10 de abril de este mismo año, dijo: "Si pudiese dar marcha atrás mas de dos años lo haría, siento mucho lo ocurrido y decirle a la familia de la chica de Madrid que no ponga en duda muchas cosas".

No ha mostrado El Chicle a lo largo del juicio signos claros de ofuscación ni de dolor, más bien ha observado el juicio desde una actitud impasible. Sí lo ha hecho la familia de Diana que ante las risas de El Chicle en la reconstrucción de los hechos, en la que volvió a mentir, se reía. "Podía hacer sido tu hija", le espetó Juan Carlos Quer, que no pudo contener el dolor. El padre de Diana había seguido hasta esa novena jornada el juicio con una compostura absoluta, centrándose en su hija pequeña, Valeria, que sacaba fuerzas para asistir a algunas de las jornadas del procedimiento.

La abogada de la defensa de Enrique Abuín, María Fernanda Alvarez, ha reiterado este martes que "no hay pruebas" para acreditar que El Chicle violó y asesinó a Diana Quer el 22 de agosto de 2016, una cuestión que ha atribuido a "una obsesión por inculparlo" dentro de una "farsa" de juicio en el que "no se han respetado los derechos constitucionales". Ha afirmado que durante el procedimiento "se ha montado una película de terror". Y ha afirmado que el "dolor permanente no justifica la prisión permanente". Y sobre el comportamiento de su defendido con las mujeres, que ha quedado sobradamente probado, dice que "una cosa es ser un ligón baboso y otra un depredador sexual".

La letrada cree que este juicio no puede ser una herramienta de venganza. Pese a todo admite un homicidio doloso que conllevaría penas de entre cinco y siete años de prisión porque considera la confesión como un atenuante. La demostración forense en el juicio de que Diana perdió la vida después de que una brida fuera apretada por el acusado durante más de cinco minutos hasta lograr su muerte ha hecho que la propia defensa argumente ahora que es posible que ejerciera una fuerza como para poder matar a Diana siendo consciente de ello.