Cédric Baekeland, prometedor ciclista belga de 28 años, murió el pasado lunes en la habitación de su hotel en Mallorca mientras descansaba. El corredor se había instalado en España junto a sus compañeros para entrenar y preparar la carrera 'Slypskapelle', donde iba a competir el próximo día 26.
El joven, del equipo Body & Bike - BMB Boekhouding, llevaba poco tiempo en el ciclismo profesional, pero los especialistas aseguran que tenía un gran futuro por delante. Durante las últimas tres temporadas se había formado en las filas del Dovy Keukens-FCC. Su mejor resultado entonces era el segundo puesto en la prueba de la Beselare-Zonnebeke en 2019, justo antes de la pandemia de covid.
La causa de la muerte fue un infarto sufrido tras un duro entrenamiento, según los informes: Estando ya en su habitación de hotel, descansando después de la jornada, Baekeland sufrió un desvanecimiento a causa de una parada cardiorrespiratoria.
El equipo Body & Bike-BMB Boekhouding ha confirmado los hechos recientemente y ha lamentando con dolor la muerte de su prometedor corredor. La plantilla del conjunto ha quedado devastada tras lo acontecido.
El joven habría avisado antes a un compañero de que se encontraba indispuesto y este habría alertado al médico, pero ya era demasiado tarde. El equipo sanitario solo pudo confirmar el fallecimiento. La noticia que ha sido confirmada por los medios belgas y ha levantado gran consternación en el país.