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La Guardia Civil de Alicante, en el marco de la operación 'Péndola', ha desarticulado un grupo criminal especializado en robar cajeros automáticos tras reventarlos con grúas y camiones para robar el dinero de su interior.
En el operativo, que se ha presentado este miércoles en rueda de prensa, se ha detenido a ocho personas en Torrevieja (Alicante) y en los municipios madrileños de Alcalá de Henares y Rivas-Vaciamadrid, de entre 30 y 50 años, pertenecientes a esta organización, y a los que les atribuye el robo de 18 cajeros automáticos, principalmente en la provincia de Alicante y la región de Murcia desde mediados del año 2020.
Los cajeros, instalados en la vía pública, eran arrancados de cuajo por los presuntos autores mediante el uso de 20 camiones grúa pluma, también robados, y que luego eran abandonados o tirados a ríos para tratar de ocultarlos. Asimismo, los agentes han determinado que el grupo también operaba en Castellón, Málaga y Huelva, entre otras provincias, y ha resaltado el "conocimiento extra" que disponía el grupo de los cajeros dado el 'modus operandi' con el que operaban.
A los detenidos se les atribuyen, al menos, 18 robos de cajeros automáticos, ya que la Guardia Civil sospecha que la banda podría estar relacionada con el asalto a un total de 42 sucursales, así como 20 robos de uso de los camiones pluma, 2 robos de turismo de alta gama de los que hacía uso la propia banda, 3 hurtos de placas de matrícula, 8 robos en vivienda, falsificación de documentos y pertenencia a grupo criminal.
Tras pasar a disposición judicial en Torrevieja, seis de los arrestados han ingresado en prisión y otros dos han quedado en libertad con medidas cautelares. Igualmente, los efectivos continúan analizando la investigación y no se descarta la posibilidad de que haya más personas detenidas, tal y como ha destacado la Guardia Civil en sala de prensa.
Las investigaciones se iniciaron a mediados de 2020, a raíz de varios robos cometidos en cajeros automáticos en la zona del sur del litoral de la provincia de Alicante y del norte de la región de Murcia. Los cajeros, instalados en la vía pública, habían sido arrancados de cuajo valiéndose para ello, de camiones grúa pluma, también robados.
La organización realizaba un minucioso estudio de la zona antes de elegir el cajero automático que iban a robar y se decantaba por aquellos situados en pequeños núcleos urbanos o en urbanizaciones aisladas y que contaran con las vías de escape necesarias para asegurarse la huida en caso de ser sorprendidos y próximas a fincas agrícolas o zonas despobladas.
Una vez elegido el cajero, buscaban en las inmediaciones la existencia de camiones grúa pluma. La noche anterior, o en la madrugada del mismo día, robaban uno de estos camiones y perpetraban el robo del cajero.
Después, se desplazaban hasta zonas aisladas, donde lo forzaban usando radiales, cuñas, mazos, palancas y otros objetos para abrirlo, accediendo al dinero en efectivo que hubiera en su interior. Luego, dejaban abandonado en el lugar el camión y el cajero fracturado y huían con lo recaudado.
Por tal motivo, los agentes iniciaron una investigación logrando localizar y detener a los ocho integrantes de una trama altamente especializada. Son seis hombres y dos mujeres, con edades comprendidas entre 30 y 50 años. Las detenciones se produjeron en las localidades de Alcalá de Henares y Rivas Vaciamadrid (Madrid) y Torrevieja (Alicante).
Los efectivos han destacado que las cantidades sustraídas ascienden a más de 500.000 euros, y los daños ocasionados, a más de 700.000 euros. Además, se han intervenido gran cantidad de efectos y herramientas para la comisión de los delitos y el valor de los objetos intervenidos asciende a 35.000 euros.