Solo dos de cada diez mujeres de entre 12 y 25 años realizan la actividad física mínima recomendada por la OMS. Sí, también hay una brecha de género a la hora de hacer ejercicio sobretodo universitaria. Concretamente, solo el 23,8 por ciento de las adolescentes españolas cumplen con las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud sobre actividad física (60 minutos al día), frente al 40,5 por ciento de los chicos.
Hay razones para ello. La principal es la carga de estudio. La clave es que ellas tienen un sentido de la responsabilidad en las chicas es mayor y existe más preocupación por las cuestiones académicas en ellas, anteponiéndolo como prioridad por encima del deporte. También hay un elemento psicológico importante, porque ellas todavía se ven menos capaces físicamente que ellos para estar a la altura a la hora de hacer deporte y la familia tampoco apoya de forma radical que ellas sean deportistas. Las nuevas formas de ocio y de relacionarse, vinculadas a las redes sociales, han provocado también que el deporte se deje más a un lado.
Del informe se desprende que las chicas comienzan a dejar de hacer ejercicio principalmente a partir del bachillerato, por lo que la mayor tasa de abandono de la actividad física se produce entre las jóvenes de 16 a 18 años, una tendencia que se mantiene desde hace 15 años, en la que los investigadores no ven señales de cambio.
De 5 a 17 años, la OMS establece que el objetivo mínimo de actividad física diaria para mejorar la salud. De hecho deben alcanzar los 60 minutos de actividad moderada o vigorosa, tomando en consideración únicamente periodos de actividad de al menos 10 minutos continuos. De los 18 a los 64 años, estas recomendaciones consisten en realizar al menos 150 minutos semanales de actividad aeróbica de intensidad moderada, o 75 minutos de actividad de intensidad vigorosa a la semana.
Así, en el grupo de edad de entre 18 a 25 años, la OMS recomienda 150 minutos semanales de ejercicio, lo que cumplen el 53,2 % de las mujeres y el 75,4 % de los hombres (una diferencia de 22,2 puntos porcentuales), según un informe de la Fundación Mapfre y la Universidad Rey Juan Carlos de Madrid, presentado este jueves en rueda de prensa.
En toda la franja de edad estudiada (de 12 a 25 años), revela que el 76 % de las chicas no cumplen esas indicaciones, lo que significa que solo dos de cada diez son activas. A medida que se avanza en edad se produce un "notable" descenso en el gasto energético semanal, que alcanza su valor más bajo en la franja de 19 a 21 años, con un ligero aumento en la transición a los 22-25 años.
El estudio se ha basado en encuestas a 10.511 españoles de entre 13 y 25 años, de ellos 5.816 mujeres, y también en grupos de discusión en los que han participado jóvenes y adolescentes, padres y madres, profesionales de educación física, profesores y entrenadores.
Ello a pesar de que la OMS advierte de que la inactividad física es un factor de riesgo de mortalidad temprana y el desarrollo de hipertensión, diabetes tipo 2, enfermedades cardiovasculares y diferentes tipos de cáncer. El rector de la URJC, Javier Ramos, ha considerado "inaceptable" la brecha que revela el estudio y ha asegurado que revertir esta situación es un "reto social" que también la universidad debe asumir