La empresa responsable de la construcción e instalación del tobogán urbano de Estepona, el más largo de España con 38 metros, ha procedido este jueves 8 de agosto a su retirada tras haber concluido la revisión complementaria a la que fue sometida.

El tobogán generó polémica el pasado mayo después de que se difundieran unas imágenes en las redes sociales en las que se veía a personas deslizándose por el mismo que finalmente sufrían heridas. Entonces, el Ayuntamiento de la localidad ordenó dicha revisión a la empresa instaladora.

El Consistorio, además, recordó que se habían instalado indicaciones de uso del tobogán, entre ellas las que prohibían deslizarse tumbado o con los brazos recogidos. Sin embargo, terminaron clausurando el mismo. Este se encontraba dentro de un conjunto de zona verde de más de 20.000 metros cuadrados y tenía como función agilizar el trayecto entre las calles de Eslovaquia y Reina Sofía.

En un comunicado, el Ayuntamiento ha recalcado que ni los trabajos de construcción ni la posterior instalación y el desmontaje de esta estructura han supuesto coste alguno para las arcas públicas, “ya que jamás se abonó cantidad alguna por el tobogán y no ha dado lugar al pago de cuantías económicas por dicha infraestructura retirada”.