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Una enfermera jubilada fue arrestada en Inglaterra esta semana después de realizar un intento desesperado por sacar a su madre de una residencia de ancianos antes de que el país entrara en un nuevo confinamiento nacional a causa de la pandemia de coronavirus.
Un video publicado en Facebook por su hija mostraba a Ylenia Angeli, de 73 años, sentada esposada en la parte trasera de un automóvil de la policía, mientras que su madre anciana, que tiene demencia, se sentaba en la parte delantera del coche de un familiar. Angeli fue puesta en libertad poco después, según informó BBC News. El personal de la residencia no quiso comentar nada sobre el incidente.
Leandra Ashton, la hija de Angeli que registró el incidente, dijo que su Ylenia perdió los nervios tras nueve meses sin poder ver a su anciana madre. Las restricciones gubernamentales habían prohibido la mayoría de las visitas en persona a los hogares de ancianos en áreas con altas tasas de infección por covid-19.
"Cuando llegamos allí, las cosas simplemente se intensificaron", dijo Ashton sobre la decisión de su madre de entrar en la residencia y luego salir con su abuela. "No lo planeamos, fue solo un momento de grandes emociones". Su abuela fue devuelta inmediatamente al centro. El incidente evidencia las dificultades con las que han lidiado muchas familias ante las cambiantes restricciones por el covid-19 en Inglaterra.
El día después del arresto de Angeli, el Departamento de Salud y Atención Social del Reino Unido dijo que los hogares de ancianos recibirían un nuevo conjunto de " principios claros sobre cómo se realizan las visitas", con arreglos que posiblemente incluyan áreas protegidas contra el covid o cápsulas al aire libre y bien ventiladas.
El segundo bloqueo a nivel nacional de Inglaterra comenzó el jueves. Mucha gente llenó las calles y bares el miércoles por la noche para disfrutar de una última noche de fiesta antes de que se ordenara el cierre de pubs y bares, y los restaurantes se restringieran a comida para llevar o solo a domicilio. Los gimnasios y tiendas no imprescindibles también han tenido que cerrar de nuevo. Los hogares tienen prohibido mezclarse en el interior, y los ciudadanos ahora solo pueden encontrarse con otra persona al aire libre, y solo cuando se pueda mantener la distancia social.
A diferencia del primer cierre nacional de Inglaterra en la primavera, las escuelas y universidades permanecerán abiertas. El Reino Unido tiene la cifra oficial de muertos por covid-19 más alta de Europa y ahora lidia con más de 25.000 nuevos casos diarios.