Las continúas mutaciones del SARS-CoV-2 están dejando fuera de juego a los fármacos más avanzados para derrotarlos. Las terapias mediante combinaciones de anticuerpos monoclonales están fracasando ante las variantes sudafricana y brasileña del virus. Por el momento, su eficacia se mantiene para derrotar a la mutación británica pero nuevos cambios en la superficie de este virus detectados recientemente ponen en riesgo también su validez.
La mala noticia se conocía al tiempo que la Agencia Europea del Medicamento, EMA, informaba de que este lunes comenzaba una revisión en tiempo real de los datos del tratamiento conocido como combinación de anticuerpos monoclonales REGN-COV2, desarrollado por la estadounidense Regeneron y usado para tratar al expresidente Donald Trump durante su convalecencia por la covid-19.
Según un informe de The Guardian, tanto el Regeneron como los medicamentos desarrollados por los laboratorios Eli Lilly y GlaxoSmithKline se han demostrado inútiles contra una o más de estas variantes.
Diseñados específicamente para luchar contra este virus, los anticuerpos monoclonales pierden su eficacia cuando el virus muta y cambia la estructura de las proteínas existentes en su superficie y que les permite engancharse y contagiar a las células humanas.
Los especialistas han expresado su profunda preocupación sobre la posibilidad de que todos estos avances queden en nada ante la rápida mutación del virus.
No hay que olvidar de que a pesar de esta mala noticia, los anticuerpos monoclonales sí están siendo muy efectivos para luchar contra el virus original.