Este lunes se celebrará el funeral de los cuatro jóvenes, vecinos de Alba de Tormes (Salamanca) que fallecieron en un trágico accidente de tráfico este domingo.
El accidente se producía minutos antes de las 7.25 horas, cuando el turismo en el que viajaban seis jóvenes se salía de la carretera en la DSA-130 (antigua CV-40) a las afueras de Galisancho (Salamanca).
Tres de ellos fallecían en el acto, una mujer de 17 años y dos varones de 17 y 20 años, mientras que el cuarto lo hacía en el hospital Virgen de la Vega sobre las 17.00 horas. Además, hay otros dos heridos, un varón de 29 años, conductor del vehículo siniestrado, y otro de 25.
Sus vecinos están unidos por la consternación. Tras las autopsias, los féretros llegaban a un pabellón convertido en capilla ardiente. Hasta allí se han acercado familiares y amigos, todos desolados.
El conductor perdió el control y acabó estampándose contra un árbol. Él está entre los dos heridos graves, que tuvieron que ser trasladados al hospital en helicóptero. Y ahora se enfrenta a cuatro delitos por homicidio imprudente.
Los seis ocupantes, en un vehículo de cinco plazas, volvían de fiesta de un pueblo cercano y, minutos antes, el taxista que avisó del accidente se había ofrecido para llevarlos a casa.
Ahora se investigan las causas con el alcohol y la velocidad como principales hipótesis.