El presunto agresor del sanitario en el Metro de Madrid se enfrenta a una pena de hasta 12 años
La calificación definitiva depende de la evolución de las lesiones del sanitario
Ha pasado su primera noche en prisión
El 8 de septiembre declarará junto a cinco testigos
El joven de 19 años acusado de la agresión a un sanitario en el Metro de Madrid podría enfrentarse a una condena de entre 6 y 12 años como consecuencia de las graves lesiones sufridas por la víctima en un ojo. Tras pasar su primera noche en prisión el Juzgado está a espera de la evolución clínica del paciente para la calificación del delito.
El Juzgado de Instrucción número 46 de Madrid ha decretado el ingreso en prisión provisional comunicada y sin fianza por un delito de lesiones agravadas. Fuentes judiciales han indicado que el juez ha citado para el 8 de septiembre al agredido y a cinco testigos.
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La Fiscalía ya solicitó el ingreso en prisión de este individuo al que imputa un delito de lesiones graves aunque la calificación final queda a expensas de en qué medida la víctima pierde visión en el ojo que recibió el impacto de la agresión.
El Ministerio Público sustentó su petición en que el detenido es de nacionalidad colombiana - se encuentra en situación irregular en España- y en que pueda eludir la acción de la justicia.
El supuesto agresor tiene antecedentes por varios robos y hurtos al descuido, delitos contra el patrimonio y una reclamación judicial en Baleares.
Fue detenido por la Policía Nacional el pasado lunes en el madrileño barrio de Villaverde cuando se dirigía a su domicilio a recoger enseres personales para probablemente ocultarse en otro lugar.
También se había cambiado el color del pelo y ocultaba los aros de las orejas para evitar ser reconocido.
La agresión se produjo el pasado jueves en la línea 1 del Metro de Madrid, cuando el sanitario supuestamente le instó a ponerse la mascarilla.
En un vídeo que circula en redes sociales se aprecia cómo un hombre propina un fuerte golpe en la cara al sanitario con lo que parece un puño americano.
"Gilipollas, que te quede claro; ojalá te mueras", dijo el agresor a la víctima antes de abandonar el convoy.