Ralph Jankus, un ciudadano alemán de 52 años, está acusado por un delito de homicidio involuntario tras la muerte de su esposa, Christel, después de que estuvieran practicando una sesión de sadomasoquismo durante 48 horas, según informa el medio Metro.
Christel, de 49 años, sufrió lesiones internas tras introducirse un objeto afilado dentro de ella. Su esposo confesó que estaban realizando sexo totalmente consentido, pero que tuvo que buscar ayuda médica después de que la mujer se encontrara mal durante los días siguientes a la realización del acto.
Los médicos no pudieron hacer nada para salvar a la mujer, que tenía el intestino perforado debido a la introducción y la posterior retiración del gancho con púas.
Un fiscal de la corte en Krefeld, Alemania, afirma que Jankus debería haber sido consciente de la peligrosidad del acto y de lo mal que lo estaba pasando su esposa, y está siendo procesado por no pedir ayuda y dejarla lesionada durante cuatro días hasta que finalmente acudieron al hospital.
A pesar de las acusaciones, el hombre admite que no fue consciente del dolor que su mujer estaba sintiendo. Ha confesado que solía practicar estas sesiones de sadomasoquismo con frecuencia durante más de 30 años, y ahora con su nueva esposa, también quería hacerlo.
Por su parte, el hijo de la víctima, afirmó que su madre estaba mentalmente inestable y que era totalmente controlada por Jankus, haciendo todo lo que este le pedía, y le acusa de haber maltratado a su madre, quien al parecer, había denunciado abusos previos a su boda, aunque después retiró las acusaciones.
El juicio por la causa, en el que Jankus se enfrenta a un delito de homicidio involuntario, continúa todavía.