Cómo actuar según el tipo de picadura: abeja, araña, escorpión o garrapata

Con la llegada del verano las picaduras de los bichos suelen ser mucho más molestas y frecuentes, y a parte de los conocidos mosquitos, que ya estamos más acostumbrados a ellos y podemos prevenirlos mejor, hay otras picaduras de otros bichos menos frecuentes que pueden provocar infecciones que requieran un tratamiento. La web especializada Kids Health, ha explicado algunos consejos para actuar ante diferentes picaduras:

Las abejas suelen dejar su aguijón unido a un saco de veneno. Por lo tanto, ante una picadura hay que intentar sacar el aguijón lo antes posible evitando abrir ese saco de veneno. Se puede aplicar hielo o una toalla húmeda en la zona afectada tras su retirada.

Tras la picadura, lavar cuidadosamente el área con agua y jabón y repetir este proceso varias veces al día hasta que se haya curado. En caso de dolor, se puede administrar paracetamol o ibuprofeno.

Las picaduras que requieren una atención médica inmediata son las que se producen en la zona de la boca, ya que pueden provocar inflamaciones importantes que pueden obstruir las vías respiratorias. Además, si existe un hinchazón importante en la zona que rodea la picadura también se recomienda acudir al especialista.

En caso de reacción alérgica, estos son los síntomas que debes conocer y que pueden tener un riesgo vital, y ante los que si se dispone de un inyectable de adrenalina, hay que administrarlo y llamar inmediatamente a los servicios de emergencias:

Ante una picadura de este bicho, hay que lavar cuidadosamente el área de la picadura con agua y jabón varias veces al día hasta la curación de la piel. También se pueden aplicar compresas frías y administrar paracetamol o ibuprofeno para el dolor.

Ante una picadura de escorpión hay que lavar el área de la picadura con agua y jabón, poner una compresa fría o hielo envuelto en una toalla y acudir inmediatamente a los servicios de urgencia. Ante una picadura de este bicho, el área de la picadura se inflamará o enrojecerá, dependiendo de la especie de escorpión que le haya picado. Además pueden ocurrir reacciones más graves al veneno del escorpión, por lo que es importante acudir a un especialista.

Ante la detención de garrapatas, hay que saber cómo separarlas del cuerpo: con unas pinzas, sujetar bien la garrapata y tirar con fuerza hacia el exterior para que se desprenda de la piel. Tras ello, aplicar alcohol en la zona para que se limpie.

Es recomendable acudir al médico también cuando se registre este suceso, y de ninguna manera tratar de quemar las garrapatas ya que es un método que pueden hundir aún más los bichos en la piel y aumentar el riesgo de contraer enfermedades.