La Audiencia Provincial de Navarra ha absuelto esta semana a dos hombres acusados de abusar de sus respectivas hijastras, de 14 años ambas. En uno de los casos la sentencia restó credibilidad al relato de la menor y en el otro la chica lo exculpó.
Uno de los ahora absueltos fue juzgado el pasado 4 de marzo por la Audiencia acusado de abusar y agredir sexualmente de la hija de su pareja, de 14 años, al considerar la sección segunda que los mensajes de móvil enviados entre ambos desvirtúan las imputaciones y restan credibilidad a parte del relato de la menor.
El tribunal asegura que la chica "no ofrece un relato de hechos que pueda valorarse con eficacia condenatoria", ya que si bien declaró con "solidez suficiente" tanto en fase de instrucción como en el juicio, "existe prueba documental (los mensajes) y testifical (los familiares del acusado) que sobre los días concretos objeto de acusación introducen una duda razonable". Y añade que estas pruebas provocan que "dicho testimonio, pese a ser en principio creíble, sea insuficiente para desvirtuar la presunción de inocencia del acusado".
En el juicio, el fiscal solicitó 23 años de prisión para el acusado por un delito de abuso sexual y otro de agresión sexual, mientras que la defensa reclamó la absolución. Según consta en la sentencia, que puede ser recurrida ante el Tribunal Superior de Justicia de Navarra, el procesado, de 28 años en el momento de los hechos, mantuvo una relación sentimental con la madre de la menor hasta enero de 2018.
En ese periodo, indica, intercambiada mensajes con su hija que "pasaron el límite de lo correcto" puesto que él llegó a pedirle que le diera "besos en la boca". Pero los magistrados no considera probadas las acusaciones: un abuso sexual el 22 de noviembre de 2017 en un polígono industrial y una agresión sexual el 25 de diciembre del mismo año en la vivienda de él.
La segunda sentencia se corresponde a un juicio celebrado por el mismo tribunal un día después, el 5 de marzo, contra un hombre acusado de haber abusado de su hijastra, también de 14 años. En este caso, la menor exculpó a su padrastro y relató que fue ella quien, estando él dormido y "borracho" en el sofá, se puso encima suya y mantuvo la relación sexual sin que el procesado se percatara.
En el juicio, el fiscal solicitó 6 años de prisión para el inculpado por un delito de abusos sexuales a menor de 16 años con la concurrencia de la atenuante de embriaguez. La defensa, por su parte, reclamó la absolución. Los magistrados consideran que no está probado que, en el mes de marzo de 2018, el procesado, "al que la menor trataba como un padre, y aprovechándose de esta situación", hubiera mantenido relaciones sexuales completas con su hijastra.
Nueve meses después de esa relación sexual, el 1 de diciembre, la chica tuvo un hijo cuyo padre es el ahora absuelto, tal y como demuestra una prueba de ADN, y había ocultado tanto a su madre como al padrastro su embarazo.
En la sentencia, que puede ser recurrida, el tribunal recoge el informe pericial forense según el cual, "desde el punto de vista médico", no se puede descartar "la posibilidad fisiológica de tener una erección del pene en estado de impregnación alcohólica". Los jueces indican que no pueden proclamar sin duda alguna que los hechos ocurrieran conforme a lo mantenido tanto por la Fiscalía como por la acusación particular, ejercida por la madre y que también pedía 6 años de cárcel. Y destacan que el inculpado, desde su primera declaración, "ha mantenido una versión constante y uniforme" acerca de los hechos imputados, que siempre negó.