El primo de Zumosol visita 'Fiesta' y relata el infierno que vivió de niño: "Quería que me arrollara un tren para dejar de sufrir"
Sergio Medialdea fue el protagonista de uno de los anuncios más famosos de los años noventa en España
El primo de Zumosol relata el infierno que vivió de niño cuando sufrió bullying por parte de unos compañeros: "Me llamaban feo"
Sergio, en la actualidad, da charlas en centros escolares para luchar contra el acoso
Sergio Medialdea, más conocido como 'El primo de Zumosol', fue uno de los rostros más conocidos de los años 90 en la televisión de la época. El modelo aparecía en un anuncio representando a un chico alto y fuerte que acudía en ayuda de un niño en apuros, una realidad muy distinta a la que Sergio había vivido tan solo unos años atrás. Sergio ha visitado el plató de 'Fiesta' y le ha relatado a Emma García la durísima infancia que pasó a causa del acoso escolar.
Pese a que ahora Sergio es un hombre alto y fuerte, cuando solo era un niño su apariencia era muy distinta. Sergio, con 14 años, medía 1,46 y llevaba gafas, motivo por el que sus compañeros entre burlas se dirigían a él como 'enano o gafotas'.
Te tratan tan mal que al final te lo crees y piensas que el mundo está mejor sin tiDía tras día, un grupo de chicos cuatro años mayores que él le daban collejas, le robaban dinero para comprar tabaco y le quitaban el bocadillo. Sergio, harto de los malos tratos, llegó a creerse lo que esos niños le decían y pensó en acabar con todo:
"Me fui a las vías de Castelldefels para que todo acabara. Me puse allí en medio de pie y cuando el tren se acercaba empezó a pitar. En ese momento vinieron a mi cabeza las dos únicas personas que me querían tal y como yo era, mis padres, y a las que no podía hacerles eso".
El antes y el después de Sergio Medialdea
Sergio, muy emocionado, le ha explicado a Emma que ese mismo día supuso un punto de inflexión para él: "Empecé a hacer deporte, me llamaban 'el chorizo colgao' porque me tiraba cuatro horas colgado de las espalderas para crecer". Y parece ser que funcionó. Sergio pasó de medir 1,46 a 1,79 metros en apenas tres años. La confianza en sí mismo le empujó a presentarse a un casting publicitario: "Allí éramos muchos chicos pero me cogieron a mí para ser el primo de Zumosol, se podría decir que fue justicia divina".
Ahora, a sus 53 años, Sergio Medialdea ofrece charlas en centros escolares en las que intenta concienciar a los niños y niñas sobre los peligros del bullying. Sergio, con la voz entrecortada, le ha contado a Emma García que siempre en sus charlas algún niño rompe a llorar al sentirse entendido: "El acoso escolar es un problema muy serio que se lleva vidas por delante, la administración tiene que tomar ya cartas en el asunto".