Poco después de que un jurado popular de la Audiencia Provincial de Madrid ha declarado a Emilio R., alias 'El Loco', culpable del asesinato de su suegra, a quien mató y descuartizó en julio de 2021 enterrando su cadáver a unos metros de la vivienda en la que convivían en la localidad madrileña de Chapinería, 'Vamos a ver' ha conseguido su primera reacción.
Tras el veredicto de culpabilidad, 'El Loco' asegura estar literalmente "jodido", habla de qué le parece esta decisión del jurado, de la absolución de África, de su inminente ingreso en prisión y hasta de sus planes de futuro.
"Ha sido justo, es lo que esperaba", admite Emilio El Loco' al ser preguntado por la decisión del jurado popular que le considera culpable del asesinato de su suegra. Sobre si quiere entrar en la cárcel, ha explicado: "Yo lo que quiero es acabar con esto cuanto antes y ya está".
Sobre la absolución de África, Emilio ha admitido alegrarse por ella: "No tengo más que decir. Si he sido yo lo tendré que pagar, soy un hombre", ha sentenciado.
En su veredicto, el tribunal descarta que se aplique la eximente completa de trastorno mental como pedía su letrado y considera probadas las atenuantes de confesión y dilaciones indebidas, lo que supondrá una rebaja de la pena de condena a imponer.
Asimismo, el jurado acuerda absolver a la entonces pareja de Emilio e hija de la fallecida, África, quien se sentó en el banquillo de los acusados a instancias de la acusación particular, que representa a la hermana de la fallecida.
En su declaración, el acusado admitió el pasado viernes el crimen y mostró su arrepentimiento. "Me arrepiento de todo. No me entra en la cabeza cómo he podido hacer eso", manifestó ratificando la confesión que en su día hizo ante la Guardia Civil y el juez que instruyó el caso.
A Emilio se le detuvo unos días después de los hechos, el 4 de agosto, tras hallar una persona restos humanos en un descampado próximo a la vivienda de María Luisa. 'El Loco' confesó ante la Guardia Civil que mató y descuartizó a su suegra con un hacha y un serrucho, enterrando su cadáver desmembrado en tres bolsas de plástico en un descampado.