Hoy se ha iniciado el juicio contra David Maroto, acusado de uno de los crímenes más brutales del año pasado. Según la investigación, Maroto habría acuchillado a su pareja, Paloma, de 45 años, y a la hija de esta, India, de tan solo 8 años. Posteriormente, el acusado se fumó un puro y se autolesionó sin éxito en un intento de quitarse la vida. El juicio enfrenta cargos graves: 25 años de prisión por el asesinato de Paloma y prisión permanente revisable por la muerte de India, al tratarse de una menor de 16 años. En 'Vamos a ver', hemos hablado con María y Carmen, hermana y madre de las víctimas, quienes han expresado su dolor y han pedido justicia.

Con la voz entrecortada, María ha declarado: "Son unos días horribles, pero vamos a luchar por ellas todo lo que podamos. Confiamos plenamente en el jurado popular y en el juez. Pedimos prisión permanente revisable por India y 25 años por mi hermana, aunque aún así me parece poco". La hermana ha recordado los dos años de sufrimiento que la familia ha atravesado tras los asesinatos: "Llevamos dos años de calvario total, como vivir en una película de terror, pero ellas nos dan fuerza para salir adelante y ahora para luchar por ellas".

Por su parte, Carmen ha descrito al acusado como un manipulador que mantuvo a su hija atrapada en una relación tóxica: "Mi hija creía que estaba enamorada de él, pero cuando empezaron a pasar ciertas cosas, estaba viviendo en un engaño. Decía que tenía una empresa, la mentía cuando se iba a sitios y la tenía controlada totalmente. Era un controlador y un mentiroso patológico".

Carmen también ha relatado cómo el acusado limitaba la libertad de Paloma: "Ella tenía un coche que le había tocado y no la dejaba usarlo. Era un psicópata, un narcisista y, sobre todo, un monstruo porque la forma en la que las mató no tiene…", ha dicho, interrumpida por las lágrimas.

Ambas mujeres han compartido el difícil momento que atraviesan al enfrentar el juicio, pero han decidido no rendirse. Carmen ha comentado: "Hemos decidido que mientras declaramos que él esté tapado. No sé de dónde vamos a sacar las fuerzas, pero creo que mirando al cielo, sabiendo que ellas están ahí".

María ha insistido en que ni su hermana conocía realmente al hombre con el que convivía: "Era como un actor. Se inventó un trabajo, una familia, y ella lo único que hizo fue enamorarse de él y él las ha matado". Carmen ha concluido con dos posibles teorías sobre el crimen: “O bien, lo tenía pensado de antes, porque además lo comentó con un amigo, o bien, mi hija le dijo que no eran horas de llegar a casa, y él, al ver que se le desmontaba todo, fue a matar. Mi hija no discutía con nadie".

El juicio promete ser largo, pero la familia de las víctimas se mantiene firme en su exigencia de justicia: una condena que asegure que crímenes como este no queden impunes.