El informe forense preliminar de la autopsia del bebé hallado muerto en el cauce del río Arlanzón a su paso por Burgos capital han determinado que el "neonato había completado su gestación y llevaba varios días en el cauce", según informa 'Diario de Burgos'. El pequeño fue encontrado desnudo, con placenta y cordón umbilical, mientras la Policía Nacional continúa investigando el hallazgo y la muerte del bebé para poder dar con la madre y esclarecer lo sucedido.

Además, 'El Correo de Burgos' han podido confirmar gracias a fuentes de la investigación que han tenido acceso al informe preliminar de la autopsia que el pequeño llevaba en en aguas del río Arlanzón un día.

Por su parte, el comisario jefe de la Policía Nacional de Burgos, Jesús Nogales, ha señalado que la investigación del hallazgo del cadáver del recién nacido en las orillas del Arlazón se encuentran en "fase preliminar" y que, de momento, se desconoce "si ha sido una muerte violenta" o si el bebé "ha nacido muerto", así como tampoco se sabe "quien lo ha depositado" en el lugar en el que se le halló.

Asimismo, ha precisado que la Policía Nacional está intentando "localizar a la madre para que explique qué ha pasado con el bebé", para lo que están investigando si los hospitales y centros de salud de Burgos han recibido a alguna mujer con señas de haber dado a luz recientemente y que haya solicitado ayuda médica.

La Policía ha ampliado a los hospitales y centros de salud de provincias cercanas a Burgos la búsqueda de indicios que permitan localizar a la madre del bebé. Una investigación que ha ampliado a otros hospitales y centros de salud, ya que, el bebé podría llevar varias días abandonado en el río.

Mientras tanto la Policía Judicial investiga esta investigando este suceso como un homicidio y como ha explicado el comisario de Burgos, Jesús Nogales, se está intentando localizar a la madre, al tiempo que ha reconocido que "la casuística es muy amplia, porque el caso podría ir desde un mero abandono, con un tema penal bastante menor, a un homicidio".

Los agentes policiales rastrearon este miércoles toda la zona del río Arlanzón, donde apareció el cadáver en busca de posibles restos u otros elementos que pudieran ayudar a esclarecer lo acontecido.

El cuerpo del neonato apareció sobre las 18.30 horas del pasado martes, 3 de diciembre, encajado entre vegetación y barro "con su placenta y con su cordón umbilical". Lo encontraron unas mujeres que estaban paseando con sus perros por la orilla del río Arlanzón, a la altura del Puente Gasset, junto al paseo Sierra de Atapuerca, en el centro de la ciudad.

Las mujeres vieron que los canes se acercaban a la orilla y ellas hicieron lo mismo para ver que olían sus perros, momento en el que "vieron que había un bebé", tal y como relataba el comisario jefe.

Al principio parecía "que era un muñeco", pero ya llamaron a la Policía Local de Burgos que comprobó que "era un bebé". Los agentes locales avisaron del hallazgo a Policía Nacional y establecieron el protocolo correspondiente.

Nogales avisaba de que no descartan "ningún escenario", tanto si la muerte del bebé fue en el lugar donde fue hallado, si fue ahí abandonado o si las aguas del Arlanzón lo arrastraron hasta esa zona.

En el marco de la investigación, la Policía Nacional está "barriendo todas las orillas del río" para ver si hay algún indicio, que "permita establecer alguna causa". Así, buscan alguna pista como alguna prenda del bebé, que fue hallado "completamente desnudo".

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