Once años después de la desaparición de Malén Zoe Ortiz hay abiertas dos nuevas líneas de investigación en el caso vuelve a estar bajo secreto de sumario. Este martes, 'Vamos a ver' ha hablado en directo con Natalia Rodríguez, madre de la joven desaparecida.
"Esto no es vivir, solamente sobrevivo. Esto no hay ni fuerza, ni corazón, ni vida que lo soporte. Lo que me mantiene viva es esa fuerza vital de una madre para seguir luchando por los derechos de mi hija para que se siga buscando y no caiga en el olvido. No solamente por mi hija, también por los miles de personas que ha desaparecidas en España", ha dicho la madre de Malén.
La madre de Malén ha exigido el derecho que tienen los desaparecidos a ser "buscados": "Tenemos una labor muy importante para que se cumplan los derechos de nuestros seres queridos a ser buscados con todos los medios posibles".
Natalia Rodríguez, madre de la joven, durante su intervención en el acto de recuerdo de su hija afirmó que días atrás había mantenido una reunión con los investigadores y también con el magistrado que instruye la causa. En el transcurso de la misma, fue informada de que la investigación sigue abierta y que están trabajando sobre dos nuevas vías de investigación. Es más, también le desvelaron que parte del caso vuelve a estar bajo secreto de sumario.
Malén Zoe Ortiz Rodríguez, su nombre de pila, desapareció la tarde del 2 de diciembre de 2013. La menor fue a clase y, tras salir del instituto, regresó a su casa, en Calviá. Su padre, con quien convivía tras su separación con su madre, no se encontraba en el domicilio, por lo que la joven decidió ir a comer a casa de su novio, en Son Ferrer. Antes de partir, le dijo al conserje de su edificio que avisara a su progenitor de que se iba con su pareja. Entonces, Malén emprendió su marcha y se subió a un autobús. Sin embargo, se pasó la parada en la que debía bajarse y lo hizo en la siguiente, en la rotonda de Pirates, en Magaluf.
Malén vestía zapatillas rosas (unas Vans, que dieron nombre al operativo de su búsqueda, Operación Vans, que sigue en curso) y unos pantalones rajados. Además, llevaba consigo su patinete, de color verde flúor, el cual utilizó para iniciar el trayecto hacia casa de su novio en Son Ferrer tras bajarse del autobús (estaba a 40 minutos a pie del domicilio). Pero aquí cambió todo. Al menos tres cámaras de vigilancia tendrían que haber grabado a la adolescente a su paso; en la primera de ellas aparecía con normalidad, en la segunda se registró una imagen borrosa y en la tercera ya no apareció. La adolescente desapareció justo tras pasar por delante del vivero de Sa Porrassa, en una carretera con mucho tránsito y viviendas. Su rastro se esfumó en apenas minutos. La principal hipótesis que se ha barajado es la de un secuestro improvisado. No obstante, este extremo no se ha podido confirmar, ya que no se ha encontrado el cuerpo, a pesar de que se hicieron búsquedas en los últimos años, no hay personas condenadas y no se ha celebrado un juicio.